El video de una monja abandonando una maleta con un cuerpo en Santiago de Chile se volvió viral en redes sociales, desatando una investigación sobre el misterioso caso. La monja fue identificada como Lorenza Patricia Ramírez Barrera, de 80 años, mientras que el cuerpo dentro de la maleta pertenecía a Erica Alejandra Fernández Mora, de 59 años.
Ramírez explicó que no se trataba de un asesinato, sino de un pacto con su amiga Erica, quien falleció un año antes por cáncer. Ambas acordaron no denunciar si alguna moría. Sin embargo, algunos se cuestionaron por qué Ramírez optó por deshacerse del cuerpo.
«Eran laicas consagradas. Mantuvieron una amistad y ella manifiesta que le tenía mucho cariño y que habían hecho un compromiso entre las dos que ninguna iba a denunciar si fallecían. Ella informa y se refiere a este pacto en el sentido de que ellas no se iban a denunciar y no iban a realizar inscripción, y que se iban a cuidar una a otra hasta el último de sus días», señaló el subprefecto de la PDI Juan Fonseca a Emol.com.
Se reveló que Ramírez y Fernández tenían una relación de pareja y eran laicas consagradas, no monjas. Ramírez mantuvo el cuerpo en su casa durante un año, pero decidió deshacerse de él cuando su hija regresó de Italia, por miedo a ser descubierta.
Una persona «laica consagrada», es normalmente «alguien que ha querido consagrar su vida a Dios, de una manera personal o a través de algún movimiento».
Ramírez fue acusada de inhumación ilegal pero quedó en libertad, ya que la Fiscalía no veía riesgo de fuga o falta de colaboración con el caso.