En una reunión de urgencia del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, Israel e Irán intercambiaron acusaciones sobre la situación en Oriente Medio, cada uno instando al Consejo a imponer sanciones contra el otro país, reseñó DW.
El embajador de Israel ante la ONU, Gilad Erdan, señaló que Irán había expuesto su «verdadera cara como desestabilizador de la región y el mundo» con su reciente ataque con drones y misiles contra Israel.
El embajador instó al Consejo de Seguridad a imponer sanciones a Irán, argumentando que estas medidas eran necesarias antes de que la situación empeorara.
Irán, por su parte, justificó su ataque como un ejercicio de su «derecho a la autodefensa». El embajador iraní ante la ONU, Amir Saeid Iravani, explicó que el ataque fue una respuesta a un incidente anterior en el que siete miembros de la Guardia Revolucionaria de Irán murieron en un ataque aéreo en Damasco, atribuido a Israel.
Ambos países expresaron su preocupación por la escalada de tensiones en la región, mientras el Secretario General de la ONU, António Guterres, advirtió sobre el peligro de una profundización del conflicto en Oriente Medio. Guterres hizo un llamado urgente a la moderación y a un alto el fuego inmediato en Gaza.