El gobierno de Joe Biden impulsó una nueva norma, que busca acelerar la negación de asilo a migrantes que representan un peligro para «la seguridad nacional o pública» de Estados Unidos.
La migración se ha convertido en un tema central de la campaña para los comicios de noviembre. Biden está tomando medidas para enfrentar la afluencia de migrantes que cruzan la frontera sin visa ni utilizar las vías legales.
Nuevo reglamento para expulsión más rápida
El Departamento de Seguridad Interior (DHS) presentó un nuevo reglamento que permite acortar el proceso para negar el asilo a un migrante que no pueda optar a él según la legislación estadounidense.
Según el DHS, esta medida afecta a una cantidad «pequeña» de migrantes, pero permite expulsarlos «más rápidamente».
Hasta ahora, los migrantes que representaban un riesgo para la seguridad nacional o pública permanecían bajo custodia del DHS. Esto mientras sus casos eran remitidos a los jueces de inmigración, un proceso que podía durar años.
Proceso acelerado de denegación
La nueva regla permite denegar las solicitudes en cuestión de días si hay pruebas de que se les puede rechazar por motivos de «terrorismo, seguridad nacional o penales». Esto se determinaría al comienzo del proceso durante las llamadas entrevistas de miedo creíble.
Según el secretario de Seguridad Interior Alejandro Mayorkas, la medida tiene como objetivo identificar y expulsar «más rápidamente a aquellas personas que presentan un riesgo de seguridad y no tienen base legal para permanecer aquí».
Datos sobre deportaciones recientes
Desde mayo de 2023 hasta mayo de 2024, el DHS expulsó o devolvió a más de 720.000 individuos a sus países, la mayoría cruzando la frontera con México. Esto incluye más de 109.000 miembros de familias.
La patrulla fronteriza ha detenido a cientos de pandilleros en los últimos meses, y el director del FBI, Christopher Wray, ha reconocido que «individuos peligrosos» han entrado en el país, reportó DW.
Esfuerzos para garantizar la seguridad
Mayorkas afirmó que esta nueva norma es «un paso más en nuestros esfuerzos continuos para garantizar la seguridad». Además de este reglamento, el DHS está actualizando su política sobre el «uso de información clasificada en procedimientos migratorios».
La crisis migratoria ha sido un desafío para Biden, quien propuso conceder la ciudadanía a 11 millones de migrantes.
Durante su mandato, más de siete millones de migrantes y solicitantes de asilo, han sido interceptados por la patrulla fronteriza tras cruzar ilegalmente la frontera con México.
Con esta nueva norma, el gobierno de Biden espera abordar de manera más eficiente la situación en la frontera y garantizar la seguridad nacional.