Los investigadores polacos Andrzej Galbarczyk y Anna Ziomkiewicz, de la Universidad Jagellónica, realizaron un estudio para descubrir qué percepción tienen tanto mujeres como hombres acerca de los hombres tatuados y qué tan atractivos pueden llegar a ser. Los resultados: no hacen diferencia en la percepción de atractivo.
El experimento
Para su estudio, los investigadores reunieron a 2.500 hombres y mujeres heterosexuales polacas. A los voluntarios se les mostraron imágenes de nueve hombres con el torso descubierto, sin ningún tatuaje.
Debían evaluar a esos individuos según el atractivo, salud, masculinidad, dominación y agresividad que les transmitían, e incluso si les parecían buenas parejas.
Luego, hicieron lo mismo con hombres tatuados. En ambos casos, era indiferente el tipo de persona, tanto jóvenes como mayores, sin necesidad de ser modelos o tener un tipo específico de cuerpo.
Los resultados
De acuerdo con los resultados obtenidos, tanto los hombres como las mujeres concluyeron que aquellos con tatuajes tenían un aspecto más masculino, dominante, agresivo y que gozaban de mejor salud que aquellos sin tatuajes.
Sin embargo, en general, no les parecían más o menos atractivos.
La percepción de las mujeres
Las mujeres percibieron a los hombres tatuados como peores parejas y peores candidatos para ser padres, además de verlos más propensos a correr riesgos. Aunque la atracción física era real, no los consideraban ideales para formar una familia. Las mujeres también dijeron que los hombres tatuados parecían “mejores en la cama”.
La percepción de los hombres
Los hombres percibieron a otros hombres tatuados como más masculinos, dominantes y agresivos, al igual que la muestra femenina. Esta percepción refuerza la idea de que los tatuajes influyen en la competencia entre hombres, viéndolos como “posibles rivales del mismo sexo”.
Conclusión
El estudio de Andrzej Galbarczyk y Anna Ziomkiewicz revela que los tatuajes afectan la percepción de masculinidad, dominancia y salud en los hombres, resaltó el medio K1.
Aunque no necesariamente los hacen más atractivos en general, sí cambian la percepción que tienen tanto hombres como mujeres sobre ellos. Los tatuajes parecen ser una herramienta de competencia entre hombres más que una característica atractiva para las mujeres.