La vicepresidenta Kamala Harris y el expresidente Donald Trump se enfrentarán por primera vez en un debate el próximo 10 de septiembre.
Las campañas de ambos políticos acordaron este miércoles las reglas establecidas por la cadena anfitriona, ABC. El evento se llevará a cabo en el Centro Nacional de la Constitución de Filadelfia.
Un formato ya conocido
El formato del debate será el mismo que se utilizó en junio pasado entre Trump y el presidente Joe Biden. Los candidatos tendrán dos minutos para responder a las preguntas, seguidos de dos minutos para réplicas, y un minuto adicional para aclaraciones.
Ambos permanecerán de pie durante los 90 minutos que durará el debate. Además, los micrófonos de los candidatos solo funcionarán cuando les toque hablar, una medida que generó algunas fricciones antes de ser aceptada por ambas campañas.
Tensión sobre el uso de micrófonos
El acuerdo sobre los micrófonos silenciados estuvo a punto de poner en peligro el debate. El equipo de Harris intentó cambiar esta norma, argumentando que perjudicaría a la vicepresidenta y protegería a Trump de los intercambios directos.
Sin embargo, decidieron aceptar las reglas de ABC para asegurar la realización del evento. «No queremos poner en peligro el debate», afirmó la campaña de Harris en una carta a la cadena.
Por su parte, Jason Miller, portavoz de la campaña de Trump, celebró el acuerdo. «Estamos encantados de que Kamala Harris y su equipo hayan aceptado las reglas ya acordadas», declaró Miller, agregando que los votantes merecen escuchar las visiones de ambos candidatos.
Un debate sin público
El debate se llevará a cabo sin público y estará moderado por David Muir y Linsey Davis, de ABC News. Según los organizadores, ninguno de los candidatos podrá tomar notas ni utilizar accesorios durante el evento.
Un curioso detalle es que una moneda lanzada al aire el martes determinó la ubicación de los podios y el orden de las declaraciones finales. Trump ganó el lanzamiento y decidió hablar en último lugar, mientras que Harris eligió el podio de la derecha en la pantalla.
Un contexto político decisivo
Este debate llega en un momento clave para la política estadounidense, en medio de encuestas que muestran una competencia reñida entre Harris y Trump.
Recientes sondeos sugieren que Harris cuenta con una ligera ventaja sobre Trump, pero aún no alcanza los niveles de popularidad que tuvieron Joe Biden en 2020 o Hillary Clinton en 2016 entre los votantes latinos.
La expectación por el debate es alta, y tanto demócratas como republicanos ven en este encuentro una oportunidad crucial para definir el rumbo de las elecciones presidenciales.
Con información de Telemundo
