Una especie de iguanas terrestres introducidas en Galápagos en 2019 para restaurar el ecosistema logró reproducirse de forma natural, así lo informó el Parque Nacional Galápagos en sus redes.
El último registro hecho sobre esta especie, denominada ”Conolophus subcristatus”, fue en 1835 por el mismísimo Charles Darwin, el naturalista británico que propuso la teoría de la evolución biológica por selección natural, o comúnmente llamada, teoría de la evolución.
Sin embargo, los estudios realizados en la isla en 1903 y 1906 por la Academia de Ciencias de California demuestran que ya en esa época no se encontraban especímenes vivos.
En el año 2019, expertos biólogos insertaron en la isla más de 3000 ejemplares con el objeto de repoblar la isla después que las iguanas terrestres estuvieran mucho tiempo fuera de ella.
El jefe de la expedición, Luis Ortiz, señaló que, "El descubrimiento de juveniles no marcados nos indica que la población está reproduciéndose in situ, lo que no se había observado desde finales de los (años) 1800 y tenemos unas estructuras de población saludable, tenemos diferente distribución de machos y hembras y juveniles en un área de aproximadamente 12 por 2 kilómetros".
La importancia de estas iguanas, según indican los expertos, radica en la contribución que hacen en ayudar a distribuir semillas, mover la tierra y alimentar a otras especies que forman parte del ecosistema.
El archipiélago de Galápagos, es uno de los sitios de atracción turística más importantes de Ecuador, formado por 13 islas grandes, 6 menores y 42 islotes; y gracias a sus características y su biodiversidad, es considerado un laboratorio natural para el estudio de las especies.
