Eduardo Bolsonaro, diputado e hijo del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, enfrenta varias acusaciones que investiga el Congreso brasileño, entre ellas “ofensas machistas” y denigrantes contra parlamentarias y una periodista, declaraciones contra instituciones que combaten el Covid 19, incitación al crimen, apología a la dictadura y a las torturas.
Opositores en el Consejo de Ética de la Cámara de Diputados denuncian que, en respuesta a una nota publicada cuestionando las políticas económicas del Gobierno, Eduardo irónicamente se burló de la periodista de O Globo, Miriam Leitao, por la tortura que ella recibió en 1972, durante la dictadura (1964-1985).
Estando embarazada y desnuda, ella fue encerrada en una habitación con una víbora; Bolsonaro Jr, recordando ese traumático episodio, expresó en sus redes sociales que la periodista está “Aún con pena de la cobra”. Ese mismo Consejo denuncia que Eduardo dijo que las parlamentarias opositoras eran “personas portadoras de vagina”.
Así como su padre, el diputado Bolsonaro, es ultraderechista y coloca a la dictadura militar como un “modelo”, criticando a las instituciones democráticas, e incluso hace cuatro años apoyó a grupos radicales que exigen la “clausura” de la Corte Suprema y el Congreso.