Representantes de la oposición argentina, denunciarán formalmente al presidente del país, Alberto Fernández, por “instigación al suicidio y amenaza de asesinato mafioso al Fiscal Luciani y amenaza a los jueces del Tribunal Oral Federal 2”.
Así lo informó el diputado Maximiliano Ferraro, presidente Coalición Cívica ARI, después de que el mandatario, durante un programa de televisión expresó que “hasta acá, Nisman se suicidó; espero que no haga algo así el fiscal Luciani”, refiriéndose al jurista que lleva la causa en contra de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, por supuesta corrupción.
https://twitter.com/Maxiferraro/status/1562625062141775872?cxt=HHwWgMCqoeDNx68rAAAA
Es de recordar que Alberto Nisman fue el fiscal que estuvo a cargo de la investigación del ataque de 1994 contra la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), donde murieron 85 personas. Fue encontrado muerto en enero de 2015, junto a un arma de fuego del calibre 22 y un casquillo de bala, hecho que fue clasificado como suicidio, pero que generó múltiples teorías de conspiración a su alrededor.
Antecedentes
No es la primera vez que declaraciones del presidente Alberto Fernández generan la reacción de la oposición, insistiendo en que sus dichos interfieren en la independencia del sistema judicial de Argentina.
Representantes del partido del expresidente, Maurio Macri, Juntos por el Cambio, rechazaron un comunicado del dirigente donde hablaba de una presunta persecución judicial contra la vicepresidenta Cristina Fernández, y presentaron una solicitud de juicio político contra el presidente Alberto Fernández.
Los denunciantes señalaron que el mandatario presenta “reiterada intromisión en el Poder Judicial”, denotando grave desconocimiento de las facultades y atribuciones de cada poder del Estado.
El fiscal Luciano solicitó “12 años de prisión e inhabilitación de por vida a ejercer cargos públicos” a la vicepresidenta de Argentina, por supuestos casos de corrupción durante su gestión como presidenta del país, acusaciones que la dirigente calificó de injuria, al asegurar que "nada de lo que se dijo en el juicio fue probado".
