El Senado de Estados Unidos aprobó este domingo en la noche un proyecto de ley antiinflacionario que además incluye la lucha contra el cambio climático y la salud, por 430.000 millones de dólares.
La medida se produjo luego de que la vicepresidenta Kamala Harris, votara a favor de los demócratas. El paquete, llamado Ley de Reducción de la Inflación, destinará $430 mil millones en nuevos gastos junto con la recaudación de más de $700 mil millones en nuevos ingresos.
El siguiente paso es enviar la legislación a la Cámara de Representantes controlada por los demócratas, que tiene la intención de abordarla el viernes, después de lo cual el presidente Joe Biden podría convertirla en ley.
“El Senado de Estados Unidos está haciendo historia”, dijo el líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer.
Aseguró que, para los estadounidenses que han perdido la fe en el Congreso, este paso les demuestra que se pueden hacer grandes cosas. Reiteró que este proyecto, que a su juicio pronto será Ley, cambiará la vida de los estadounidenses.
Las disposiciones impositivas del proyecto de ley incluyen un nuevo impuesto mínimo del 15% sobre algunas corporaciones con ganancias anuales superiores a $1 mil millones.
Además, impone un nuevo impuesto sobre la recompra de acciones, y espera recaudar $70 mil millones adicionales en ingresos fiscales por año, según los legisladores.
Asimismo, el presupuesto del Impuesto Sobre la Renta (IRS) de la agencia tributaria de EEUU recibiría más fondos para impulsar su recaudación de impuestos.
El proyecto de ley también exige miles de millones de dólares para fomentar la producción de más vehículos eléctricos e impulsar la energía limpia, con ello se busca estimular nuevas inversiones en energía eólica y solar.
El proyecto fue aprobado después de una sesión de debate de fin de semana de 27 horas y los esfuerzos republicanos para descarrilar el paquete.
El presidente de EEUU, Joe Biden, celebró la aprobación y a través de su cuenta de Twitter aseguró, “me presenté a las elecciones prometiendo hacer que el Gobierno vuelva a trabajar para las familias trabajadoras, y eso es lo que hace esta ley".
Los demócratas aseguran que esta iniciativa podrá ayudar a reducir la inflación debido a que la medida se paga sola y pretende reducir el déficit federal. Además, buscan que el éxito de este domingo pueda ser un aliciente para las elecciones intermedias de noviembre.
Por su parte los republicanos, quienes han denunciado que no atacará la inflación, han señalado en repetidas ocasiones que el proyecto responde solo a los intereses de la izquierda y que podrían poner en peligro la economía del país.
