Suenan todas las alarmas en la Organización Mundial de la Salud (OMS) al dar a conocer dos casos de infección por el virus de Marburg en Ghana.
Los pacientes, ambos fallecidos, de la región de Ashanti no se conocían previamente lo que indica que la enfermedad podría estar propagándose con rapidez por lo que las autoridades locales se preparan para un posible brote.
Las autoridades de la región afirmaron que los ghaneses sufrieron de diarrea, fiebre, náuseas y vómitos. Aún no se han revelado ni la edad ni el sexo de las personas.
Las pruebas realizadas a los pacientes dieron positivo aunque están siendo reevaluadas por los científicos de la Organización Mundial de la Salud.
"Las autoridades sanitarias están investigando la situación sobre el terreno y preparándose para una posible respuesta al brote", afirmó el representante de la OMS en Ghana Francis Kasolo.
"Estamos trabajando en estrecha colaboración con el país para aumentar la detección, rastrear contactos, estar listos para controlar la propagación del virus" agregó el funcionario.
Esta sería la segunda vez que se detecta este virus en África, el primero en Guinea en agosto de 2021 cuando la región de Nzérékoré registrara la muerte de un hombre a causa de esta enfermedad.
Se han registrado casos de brotes anteriores esporádicos como en Angola, República Democrática del Congo, Kenia, Sudáfrica y Uganda. El peor de todos los episodios fue en Angola cuando entre 2004 y 2005 la enfermedad mató a 227 personas.
El virus de Marburg es una enfermedad altamente infecciosa de la misma familia del ébola, mata al 90% de las personas que infecta. Se transmite a través de los murciélagos de la fruta y se propaga entre los humanos por el contacto directo con fluidos corporales y superficies infectadas.
El primer caso conocido se dio en 1967 cuando unos monos de Uganda infectaron a las ciudades alemanas de Marburg y Frankfurt.
La enfermedad fue detectada por segunda vez en 2008 cuando una mujer holandesa viajó desde Uganda hacia los Países Bajos, después de visitar unas cuevas de murciélagos Rousettus.
La enfermedad comienza de forma abrupta, dejando a las personas con “aspecto de fantasmas” por el profundo hundimiento en los ojos, y la inexpresividad facial, intensos dolores de cabeza, fiebre, diarrea, dolor de estómago y vómitos.
Luego de los primeros cinco días, comienzan a presentar sangrado por la nariz, oídos, encías, los ojos y la vagina. En los casos mortales, el fallecimiento suele ocurrir entre los 8 o 9 días después del inicio de los síntomas.
Aún no existen tratamientos ni vacunas para contrarrestar el virus pero la OMS está probando con anticuerpos y antivirales.