La Corte Suprema de Estados Unidos aprobó que el expresidente Donal Trump, entregue las declaraciones de impuestos a una comisión del Congreso, tras una pugna legal de tres años.

De esta manera, el organismo rechazó la petición del expresidente, de emitir una orden que habría impedido al Departamento del Tesoro, entregar la recopilación de seis años de dichos documentos, al comité de Medios y Arbitrios de la Cámara de Representantes.

Los tribunales inferiores acordaron que el comité posee amplia autoridad para obtener esa documentación, y rechazaron las afirmaciones de Trump de que el organismo se estaba excediendo y solo quería los registros para que pudieran hacerse públicos.

En octubre de este año, un tribunal de apelaciones ya había autorizado a un comité de la Cámara Baja de Estados Unidos, a acceder a las declaraciones de impuestos de Trump, ante el Servicio de Impuestos Internos (IRS), sin embargo, este no acató la medida.

Si el exmandatario hubiera persuadido al alto tribunal de la nación norteamericana para que interviniera, podría haber agotado el tiempo del comité, ya que el Partido Republicano tomará el control de la Cámara de Representantes el próximo mes de enero.

Analistas aseguran que de haber sido así, y en caso de que la cuestión no se hubiera resuelto para entonces, es casi seguro que habrían abandonado la solicitud.

El cuento hace tres años

Desde 2019, esa comisión y su presidente, el demócrata Richard Neal, solicitaron por primera vez las declaraciones de impuestos del entonces mandatario, como parte de una investigación sobre el programa de auditoría del Servicio de Impuestos Internos, y el cumplimiento de la ley fiscal por parte de Trump.

En aquel momento, Steven Mnuchin, quien se desempeñaba como secretario del Tesoro estadounidense, decidió retener dicha información y argumentó que la oposición solo le pedía por razones partidistas. El Departamento de Justicia defendió la decisión.

Sin embargo, con la llegada de Joe Biden a la Casa Blanca en 2021, el comité renovó la solicitud, en la que pedía las declaraciones de impuestos de Trump e información adicional de 2015 a 2020.

El Gobierno señaló que la solicitud era válida, y detalló que el Departamento del Tesoro tenía que cumplirla, por lo que el exmandatario intentó detener la entrega por la vía jurídica.

Trump fue el primer presidente estadounidense, desde Gerald Ford, que no publicó cada año su declaración de impuestos, una tradición que sus predecesores consideraban parte de su deber de transparencia y de rendición de cuentas ante la población.