Este miércoles 6 de junio, las Fuerzas Armadas rusas formalizaron las condiciones necesarias para el manejo de dos corredores humanitarios marítimos en los mares Negro y Azov, así lo informó Mijaíl Mízintsev, jefe del Centro Nacional de Gestión de la Defensa rusa.
Mízintsev detalló que el corredor en el mar Negro funcionará de 08:00 am a 19:00 pm,hora de Moscú, mide 139 millas de largo, tres millas de ancho y se utilizará para salir de los puertos de Jersón, Nikoláev, Ochákov, Odesa y Yuzhni hacia el suroeste del mar territorial de Ucrania.
A su vez, el corredor en el mar de Azov estará disponible las 24 horas del día con dimensiones de 115 millas de largo, dos millas de ancho y será utilizado para salir del puerto de Mariúpol hacia el mar Negro.
El presidente ruso, Vladimir Putin, alegó que uno de los objetivos de este proyecto es proteger a la población de Donbass de los abusos y el genocidio de Kiev que han sufrido durante los últimos ochos años.
Serguéi Lavrov, canciller ruso, enfatizó que para el buen desempeño de estos corredores es necesario que los ucranianos limpien de minas la franja de mar adyacente a la costa que se encuentra bajo el control de Kiev.
La entrada y salida de buques mercantes se ve obstaculizada por las acciones de las autoridades de Kíev y las instalaciones de más de 400 minas marinas en los mares Negro y Azov que amenazan a los barcos. Ucrania reconoció la pertenencia de las millas, sin embargo, se desconocen sus ubicaciones exactas. Debido a estas minas, decenas de barcos extranjeros permanecen bloqueados en los puertos de Nikoláev, Jersón, Chernomorsk, Ochakov, Odesa y Yuzhni.
Rusia ha insistido repetidamente a la comunidad internacional -principalmente a la Organización Marítima Internacional- que influya en Kiev para que tomen medidas favorecedoras a desbloquear y garantizar la seguridad de la salida de barcos extranjeros de los puertos de Ucrania.
