Libby (Elizabeth) Sander, directora de MBA y Profesor Asistente de Comportamiento Organizacional en Bond University, Australia, señaló que hay una gran diferencia entre una empresa impulsada por una misión como SpaceX, y una plataforma como Twitter.
“Cuando hay una misión común para lograr algo extraordinario o que no se ha hecho antes, los empleados a menudo trabajarán voluntariamente muchas horas en situaciones difíciles”, explicó Sander.
Asegura que la evidencia muestra que el cambio organizacional exitoso requiere: una visión clara y convincente que se comunique de manera efectiva; participación de los trabajadores; y equidad en la forma en que se implementa el cambio.
Sin embargo, Musk -el hombre más rico del mundo- aparece con prisa por convertir Twitter en un generador de dinero.
Hay que recordar que desde que se hizo cargo de la plataforma del pajarito, el 27 de octubre, Musk ha despedido a unos 3.700 empleados, aproximadamente la mitad de la fuerza laboral de Twitter.
Como último paso envió un ultimátum al personal para comprometerse con un nuevo método "extremadamente duro" que "significará trabajar muchas horas a una alta intensidad" como dijo en un correo electrónico. Los empleados tenían hasta las 5:00 p. m. del día siguiente para aceptar o tomar un paquete de indemnización.
Según los informes, alrededor de 500 empleados escribieron mensajes de despedida.
Tantos empleados decidieron irse, que en medio de la confusión, desde el viernes hasta el lunes, Twitter bloqueó a todo el personal fuera de su oficina, por no haber claridad sobre quién todavía trabajaba allí y debería tener acceso.
Subrayó que elegirán ir más allá y trabajar muchas horas, si se sienten alineados con el propósito de la organización, o si su trabajo es importante.
No es un dato menor que tanto Tesla como SpaceX tienen muchos empleados descontentos, con demandas presentadas por las condiciones laborales y el estilo de gestión de Musk.
“Ha sido elogiado por su pensamiento sobre el diseño interactivo y la resolución de problemas de ingeniería. Es importante desafiar los modelos antiguos que pueden ya no ser útiles. Pero los fundamentos del liderazgo y el cambio organizacional siguen siendo esenciales, y Musk se queda muy corto en estos”, aseguró.
El exjefe de confianza y seguridad de Twitter, Yoel Roth, quien renunció el 10 de noviembre, escribió la semana pasada: “Casi inmediatamente después del cierre de la adquisición, surgió una ola de trolling racista y antisemita en Twitter”.
Los especialistas en marketing cautelosos, incluidos los de General Mills, Audi y Pfizer, redujeron o detuvieron la inversión publicitaria en la plataforma, lo que provocó una crisis dentro de la empresa para proteger los valiosos ingresos publicitarios.
