La Federación Internacional de Fútbol (FIFA) reformó el Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de jugadores, que permitirá a los clubes amateurs inscribir a jugadores extranjeros, menores de 18 años, refugiados o solicitantes de asilo, como informó la agencia de noticias EFE.
Cientos de niños llegados a las costas de España en Canarias, Andalucía o Murcia, en pequeñas embarcaciones, huyendo de sus países de origen, encontraban en el fútbol un medio para integrarse a sus nuevos hogares.
Muchos de esos niños tenían cualidades para convertirse en profesionales, sin embargo, la FIFA les prohibía jugar porque consideraba que fomentaba el tráfico de jugadores, y en algunos casos, cuando los jugadores no cumplían con las expectativas de sus equipos, eran abandonados.
En esta situación se encontraban Bakary, Issa, Yacouba, Sekou, y decenas de adolescentes africanos más, bajo tutela del Gobierno de Canarias desde que llegaron a las islas, sin un adulto que cuidara de ellos. Entrenaban en clubes modestos para hacer deporte, practicar español y entablar amistades.
La FIFA aceptó la situación que le había planteado el fútbol español, a petición de numerosas personas implicadas en la educación de menores vulnerables en Canarias, entre ellas la juez de Menores, Reyes Martel, que incluso recabó el apoyo de un campeón del mundo, Vicente del Bosque, para intentar hacerse oír en la Real Federación Española de Fútbol.
“Se ha encontrado un equilibrio entre la aplicación estricta de la excepción para evitar la elusión (de la norma) y los intereses de los niños, cuya situación particular no entra en el estatus estrecho o formal de solicitante de asilo o refugiado, pero que, sin embargo, han sido reconocidos como vulnerables y que requieren la protección del estado a las autoridades estatales competentes”, señala la FIFA.
Por su parte, la directora general de Protección a la Infancia del Gobierno de Canarias, Iratxe Serrano, se pronunció varias veces contra esa discriminación contra menores reconocidos legalmente como vulnerables. “No vinieron a España a jugar al fútbol, pero el deporte es su vía de integración”, señaló Serrano.
“Tengo varios menores que estaban desesperados con este tema. Uno de ellos es muy bueno, aunque eso es lo de menos, porque lo importante es que jueguen. Y me pregunta todos los días, ‘¿cuándo voy a poder fichar, cuándo?’”, relata la magistrada Reyes Martel, una jueza de menores en la Gran Canarias.
La FIFA anunció que en un plazo de una semana se espera adoptar la modificación de la norma.