Este lunes, la Oficina Federal de Investigación (FBI) aclaró que la motivación del atacante de Paul Pelosi fue “política”, y que será juzgado por los cargos de agresión, intento de homicidio y secuestro, como informó el medio de noticias CNN.
Según el informe de la policía de San Francisco, Dave DePape, el agresor, en realidad iba en búsqueda de la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, para romper sus rodillas con la intención de que fuera en silla de ruedas al Congreso, para que los congresistas vieran que “sus acciones tienen consecuencias”.
DePape, de 42 años, ingresó a la casa de los Pelosi por una puerta de cristal que rompió con un martillo, se dirigió a la habitación principal, despertó a Paul Pelosi y le preguntó por la presidenta de la Cámara de Representantes.
El esposo de la alta funcionaria le respondió que ella no estaba y que se iba a ausentar por varios días, posteriormente increpó al atacante sobre una posible solución a la situación. El atacante sacó unas cuerdas de su bolsillo para atarlo, pero este salió corriendo en busca de ayuda, sin embargo DePape lo alcanzó y regresaron a la habitación.
Pelosi pudo ir al baño y llamar al 911 a las 2.23am del viernes, para denunciar que había un hombre en su casa que no conocía y que pretendía esperar a Nancy Pelosi. El atacante no se marchó después de la llamada ya que “al igual que los padres fundadores estadounidenses con los británicos, estaba luchando contra la tiranía sin la opción de rendirse” dijo al ser detenido.
Al llegar la policía, ambos bajaron al llamado, y al preguntar qué estaba pasando, el atacante golpeó con el martillo en la cabeza a Paul Pelosi, que posteriormente justificó en el interrogatorio, que lo hizo para que “recibiera en castigo en su lugar” por llamar a la policía.
El Departamento de Justicia señaló que al atacante se le imputan los cargos de asalto y secuestro, sin embargo la fiscal del distrito de San Francisco, Brooke Jenkins, informó que presentarán también cargos por homicidio y otros más.
El pasado 29 de octubre, las fuerzas del orden registraron el garaje de una residencia en la calle Shasta en Richmond, California, donde vivía el acusado, e incautaron dos martillos, una espada y un par de guantes de goma y tela. Los agentes también encontraron pruebas de que DePape vivía en ese sitio, donde además encontraron documentación diversa.
