Casi 10,4 millones de niños en todo el mundo han perdido a uno de sus padres o cuidadores a causa de la Covid-19, de acuerdo con el último informe publicado en la revista médica JAMA Pedriatrics.
Esta publicación, que actualiza las estimaciones de la orfandad asociadas con el coronavirus y la pérdida de cuidadores durante los primeros 26 meses de la pandemia, analizó en detalle los datos publicados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre las muertes registradas a partir de mayo de 2022, y detalló que 7.5 millones de niños perdieron a sus padres, mientras que tres millones más de perdieron a su cuidador principal.
En este estudio participaron la Universidad de Oxford, el Imperial College, el Instituto Africano de Ciencias Matemáticas, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y la OMS.
Expertos del área señalaron que, a través de este informe, es la primera vez que se pueden obtener datos concretos sobre el exceso de muertes para cada país debido a esta pandemia. Con esta información, los estadistas pudieron actualizar las estimaciones mínimas globales de orfandad pandémica y muerte de cuidadores entre los niños en función de este exceso de muertes.
El documento destaca que la pérdida de los padres o de un cuidador expone a los niños a un mayor riesgo de abuso, pobreza y problemas de salud mental como la depresión, la ansiedad y el suicidio.
Susan Hillis, copresidenta del Grupo de Referencia Mundial sobre Niños Afectados por la COVID-19, una asociación entre la Universidad de Oxford y la OMS resalta que, si los niños no reciben el apoyo adecuado, o si sus dificultades son especialmente graves, el estrés puede incluso cambiar la arquitectura de sus cerebros y dejarlos más vulnerables a todas las principales causas de muerte.
El estudio exhorta a los gobiernos a través de sus instituciones de salud pública para atender los impactos duraderos del duelo en los niños que han perdido a sus padres o tutores a causa del coronavirus, además seguir promoviendo las vacunas y las medidas de prevención.
“La acción eficaz y afectuosa para proteger a los niños de los daños inmediatos y a largo plazo de Covid-19 es una inversión en el futuro y un imperativo de salud pública”, destaca el estudio.
La investigación indica que los países más afectados fueron India, Indonesia, Egipto, Nigeria y Pakistán.
