A raíz del descubrimiento el mes pasado del virus de poliomielitis en Nueva York, un alto funcionario de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) indicó que ‘’debe haber varios centenares de casos en la comunidad circulando’’, según refiere la prensa estadounidense.
El primer caso se encontró en el condado de Rockland, que tiene una tasa de vacunación contra la polio increíblemente baja. El doctor José Romero, uno de los directores del CDC aseguró que la mayoría de las personas con poliomielitis no presentan síntomas, por lo que pueden contagiar el virus sin saberlo. "Este es un asesino silencioso, como el monóxido de carbono, y no sabemos cuándo nos va a golpear", comentó.
Un grupo de detectives de enfermedades de los CDC, viajó la semana pasada desde la sede en Atlanta hasta el condado de Rockland, y aseguraron que están ‘’bastante preocupados’’ por el virus, ya que podría salirse de control en cualquier momento y podría generar una crisis.
La Comisionada de Salud del estado de Nueva York, Mary Bassett, advirtió que el caso confirmado de polio en un joven de 20 años y la detección del virus en las aguas residuales de las afueras de la ciudad podrían indicar que está en marcha un brote mayor.
"Basándonos en anteriores brotes de poliomielitis, los neoyorquinos deben saber que, por cada caso de poliomielitis paralítica observado, puede haber cientos de otras personas infectadas", aseguró Bassett.
Los CDC se plantean una gran variedad de opciones para proteger a las personas del contagio, como ofrecer a los niños de la zona una inyección adicional de la vacuna, como lo están haciendo ahora las autoridades sanitarias del Reino Unido en Londres, o recomendar dosis adicionales a ciertos grupos de adultos.
En Estados Unidos, el último caso de poliomielitis natural ocurrió en 1979. Hoy en día, a pesar de los esfuerzos mundiales por erradicar el virus, este sigue afectando a niños y adultos en zonas de Asia y África.
¿Qué es la poliomielitis?
La poliomielitis es una enfermedad viral contagiosa que, en su forma más grave, provoca lesiones a los nervios que causan parálisis, dificultad para respirar y, en algunos casos, la muerte.
El virus entra a través de la boca y la nariz, se multiplica en la garganta y en el tracto intestinal para luego ser absorbido y diseminarse a través de la sangre y el sistema linfático. El tiempo que pasa desde el momento en que una persona resulta infectada con el virus hasta la aparición de los síntomas de la enfermedad (incubación) oscila entre 5 y 35 días (un promedio de 7 a 14 días). La mayoría de las personas no presenta síntomas.
Síntomas
Aproximadamente una de cada cuatro personas infectadas tiene síntomas parecidos a la gripe, que pueden incluir:
- Dolor de garganta
- Fiebre
- Cansancio
- Náuseas
- Dolor de cabeza
- Dolor de estómago
Estos síntomas por lo general duran de 2 a 5 días y luego desaparecen por sí solos.
