Cristina Fernández de Kirchner reapareció este jueves en el Estadio Único de La Plata, Argentina, en la que encabezó la celebración del Día de la Militancia Peronista, sin embargo, lo que resaltó de esta actividad, es que la vicepresidenta asomó una posibilidad a una candidatura para las próximas elecciones presidenciales.
En este sentido afirmó que "las elecciones se pueden ganar, pero los condicionamientos son tan graves, tan profundos, que nos han dejado. Va a requerir que la mayor parte de los argentinos tiremos todos juntos para el mismo lado. Si no es así, nuestro país será difícil para cualquiera", destacó CFK.
Por eso llamó a "militar por una Argentina" a través de un modelo sustentable económico y social, el cual permitirá reanudar los logros alcanzados en las gestiones del 2003 al 2015.
Analistas en la materia aseguraron que este acto tuvo distintos objetivos, entre los que destacan el resaltar el peronismo que, durante la actividad, se mostraron imágenes de Perón y Evita, así como Néstor Kirchner elogiándola, y de Diego Maradona diciendo "Cristinista hasta los huevos".
La expresidenta abordó temas como la inseguridad, las ejecuciones y los excesos policiales que en un pasado se negó a debatir.
Ante este panorama, instó a todos los actores políticos a un acuerdo, criticando las medidas adoptadas por el partido opositor Juntos por el Cambio, y al actual ministerio de Seguridad de la Nación.
Recordó que, tras varios golpes de Estado, el 30 de octubre de 1983, se inició un ininterrumpido proceso democrático que se quebró el 1 de septiembre, tras el atentado que sufrió en la puerta de su casa.
"Nadie quería matar a nadie, a nadie se le deseaba la muerte por pensar distinto, ni siquiera a aquellos que habían hecho de la muerte un instrumento político", subrayó
En este punto, Cristina fue enfática al señalar que el pueblo tendrá que "decidir si quiere volver a ser esa Argentina que alguna vez tuvo".
La vicepresidenta les solicitó a sus seguidores no olvidar los logros alcanzados durante la crisis económica, política y social de 2001. "Convirtamos el 17 de noviembre en el día del militante por la Argentina, que necesita militantes de su pueblo, de sus trabajadores, de sus científicos, de sus intelectuales".
Ante un estadio copado hasta su totalidad con gente que coreaban "Cristina Presidenta", Fernández de Kirchner tomó agua y respondió: "Como decía el General todo en su medida y armoniosamente".
El acto se desarrolló en el marco de un reforzado dispositivo de seguridad tras el intento de magnicidio. En las inmediaciones del estadio se desplegaron detectores de metales y dos anillos de seguridad que incluyeron efectivos con perros y grupos de fuerzas especiales.