2022 ha sido un año oscuro para los periodistas. Según cifras de Reporteros Sin Fronteras (RSF), la tasa de asesinatos ha aumentado considerablemente este año. En total, 57 periodistas han perdido la vida ejerciendo su profesión.
Particularmente, en Ucrania, murieron ocho periodistas desde el comienzo de la guerra el pasado febrero.
Asimismo, en 2022 han sido detenidos 533 periodistas, 65 han sido secuestrados, y 49 se encuentran actualmente desaparecidos.
Reporteros Sin Fronteras señala que 2012 y 2013 fueron los años más mortíferos para los profesionales de la información. La guerra de Siria fue la principal causa del repunte.
Pero el peligro no solo se mantiene en las zonas de guerra. Según la ONG, Rusia ha sido el país más peligroso de Europa para los periodistas, debido a asesinatos selectivos.
En la recapitulación de la última década, Francia también figura cerca de Rusia, principalmente por el atentado terrorista contra la revista satírica Charlie Hebdo en 2015, hecho en el que murieron 12 personas.