El gobierno de China denunció que la ley proteccionista decretada ayer martes en EEUU para la industria de semiconductores (chips) “socavará las cadenas de suministro globales”.
El portavoz de la cancillería china, Wang Wenbin, aseguró que la nueva normativa restringe “la inversión y las actividades comerciales y económicas normales de las empresas relevantes en China, así como limitan la cooperación científica y tecnológica entre China y EEUU”. Además, creará obstáculos para el comercio internacional, dijo.
Por tal razón, el gobierno del gigante asiático instó a La Casa Blanca a respetar lo establecido por la Organización Mundial de Comercio sobre los principios de apertura, transparencia y no discriminación.
Recordemos que la demanda mundial de semiconductores se disparó durante la pandemia de coronavirus y provocó una escasez mundial que se agravó con la clausura de fábricas chinas por los rebrotes en los contagios.
Cabe destacar que la Ley “Chips y Ciencia” firmada por el presidente estadounidense, Joe Biden, impulsa el desarrollo y la producción de semiconductores en el país pues invierte 52.700 millones de dólares en subvenciones para vencer "la competencia económica del siglo XXI".
No es un dato menor que Estados Unidos fabricaba hace 30 años el 40% de la producción internacional de los semiconductores mientras que actualmente elabora sólo el 10%.
El resto es fabricado principalmente en Taiwán y otro porcentaje menor en China.
Por tal razón, los analistas consideran que la especie de protectorado en sombras que ejerce Estados Unidos sobre Taiwán responde directamente a la necesidad que tiene de su tecnología a pesar de que las máquinas para hacer los microchips son made in USA.
El periodista Craig Addison hizo popular el término “el escudo de silicio” para graficar por qué China no intenta de una vez por todas una acción militar sobre Taiwán.