En un intercambio de prisioneros de alto nivel al estilo de la Guerra Fría, Rusia liberó este jueves a la basquetbolista de la WNBA, Brittney Griner, y Estados Unidos a su vez, liberó al traficante de armas ruso, Viktor Bout, según anunciaron ambos gobiernos.
"Hace un momento hablé con Brittney Griner. Está a salvo. Está en un avión. Está camino a casa", anunció el presidente estadounidense, Joe Biden, a través de las redes sociales.
El mandatario informó el éxito de la operación que se realizó en Emiratos Árabes Unidos.
Desde el Despacho Oval de la Casa Blanca, el mandatario sostuvo un encuentro con Cherelle Griner, esposa de Griner, dos veces campeona olímpica y dos del mundo con el Team USA. En la reunión también se encontraba la vicepresidenta Kamala Harris y el Secretario de Estado Antony Blinken.
“Después de meses de estar injustamente detenida en Rusia, retenida en circunstancias intolerables, Brittany pronto volverá a estar en los brazos de sus seres queridos, donde debería haber estado todo el tiempo”, subrayó el presidente.
Así como autoridades estadounidenses confirmaron que Griner ya estaba bajo su custodia, la cancillería rusa también confirmó que Viktor Bout regresó a Rusia en un vuelo privado.
Los personajes
Bout, conocido como "el mercader de la muerte", es un exmilitar soviético que estaba pagando una condena de 25 años en los Estados Unidos, acusado de conspirar para matar, adquirir y exportar misiles antiaéreos y brindar apoyo a organizaciones terroristas.
El Kremlin criticó esta sentencia dictaminada en el año 2012 y la calificó como “infundada y tendenciosa".
Por su parte, la basquetbolista Brittney Griner, fue arrestada por cargos de tráfico de drogas en un aeropuerto de la región de Moscú y sentenciada a nueve años de prisión en el mes de agosto. Cumplía su condena en una colonia penal en Mordovia desde mediados de noviembre.
Sin embargo, durante este acuerdo no se concretó la liberación del estadounidense Paul Whelan, un ejecutivo de seguridad que fue condenado a 16 años de prisión en 2020 acusado de espionaje en Rusia.
Actualmente está cumpliendo su sentencia en un campo de trabajo en Mordovia, a ocho horas de Moscú.
En este sentido, el presidente Biden anunció que no se dará por vencido en liberar y traer de regreso a casa a Paul Whelan.
“No nos hemos olvidado de Paul Whelan, quien estuvo injustamente detenido en Rusia durante años. Esta no fue una elección sobre a qué estadounidense traer a casa”, afirmó el mandatario.
A juicio del jefe de Estado, por “razones totalmente ilegítimas, Rusia está tratando el caso de Paul de manera diferente al de Brittney y, aunque aún no hemos logrado asegurar la liberación de Paul, no nos vamos a dar por vencidos”.
