Joseph Aloisius Ratzinger, conocido en el mundo espiritual como el papa hemérito Benedicto XVI, ha muerto después de varias complicaciones de salud y su avanzada edad. Así lo anunciaron representantes del Vaticano, donde vivía después de abdicar como máxima autoridad de la iglesia católica.
El alemán fue el papa número 265 y séptimo soberano de la Ciudad del Vaticano. Resultó elegido el 19 de abril de 2005, tras el fallecimiento de Juan Pablo II, por los cardenales que votaron en el cónclave.
Una dura y disciplinada juventud en Alemania
Benedicto nació el 16 de abril de 1927 en Marktl (Baviera, Alemania), diócesis de Passau, en el seno de una familia de agricultores alemanes, de profundas convicciones católicas.
A muy temprana edad, con solo 11 años ingresó en el seminario y fue obligado a inscribirse en las Juventudes Hitlerianas, hasta el punto que en 1943 combatió en la Segunda Guerra Mundial como integrante de una unidad antiaérea, experiencia que le pareció desagradable y hostil.
Seguidamente estudió filosofía y teología en el ateneo de Munich y en la escuela superior de Freising, hasta que en 1951 fue ordenado finalmente sacerdote. Los dos años siguientes los ocuparía en preparar la tesis de doctorado, un ensayo sobre San Agustín, que fue calificado con un cum laude.
Su cercanía con Juan Pablo II
Benedicto fue nombrado por Pablo VI obispo de Munich en 1977 y lo elevó al cardenalato, rol que asumió con máxima responsabilidad y disciplina y por el cual pudo conocer a Juan Pablo II , con quien trabó una sólida amistad.
La amistad se fortaleció hasta el punto que, en 1981, Juan Pablo II lo nombró prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, institución que sucedía al Santo Oficio y que le labró el camino para asumir como papa.
Su elección como papa estuvo a cargo de 115 cardenales en el 2005, y el mismo año se convirtió en el segundo papa en la historia en visitar una sinagoga.
Celebró su primer consistorio y elevó formalmente a 15 hombres al nivel de cardenal en 2006, año en el que también visitó el pueblo de Turquía y el año siguiente el pueblo de Brasil, territorios dónde lo recibieron con amor y devoción.
De igual manera, Benedicto logró reunirse con el presidente de Estados Undios, George W. Bush en el Vaticano, dónde debatió sobre temas referentes a la situación política en Irán, las relaciones musulmanas y el sida.
Asimismo, logró la mayor beatificación masiva de la historia, al elevar el espíritu de 498 víctimas de la Guerra Civil española, ocurrida en la década de 1930.
Pedido de perdón por las víctimas de abuso sexual
En cuanto a temas polémicos Benedicto fue el único papá que pidió perdón por los abusos sexuales dentro de la iglesia, y prometió hacer más para detener futuros incidentes.
En 2011 Benedicto se convirtió en tendencia tras enviar su primer tweet para anunciar el lanzamiento del nuevo sitio web del Vaticano, el cuál logró posicionarse en las redes en cuestión de segundos.
En 2013 anunció que se jubilaría justificando su edad avanzada como el motivo; Benedicto era considerado dentro del Vaticano como el máximo colaborador de la verdad, su solidaridad con los pueblos del mundo, su comprensión en temas de guerra y su lucha ante los conceptos de libertad lo diferenciaron del resto.
El escritor José Barros Guede en su ensayo "Semblanza y personalidad del papa Benedicto XVI", describe a un Benedicto afable y amable que amaba a su tierra patria, Baviera, a su familia y a sus amigos, entusiasta por el latín, la liturgia y la música gregoriana y clásica”
El autor además insistió en que “como teólogo, fue uno de los grandes intelectuales cristianos del momento cultural actual en todo el mundo, un buscador incansable de la verdad y un sensible defensor de la fe tradicional cristiana, pero abierto a las culturas actuales tratando de armonizar la fe y la razón. Como Papa, fue un nato pastor religioso preocupado por la unidad de la Iglesia, la familia, el matrimonio y la nueva evangelización del mundo actual”.