Ucrania informó este martes que bombardeó plataformas petroleras en el mar Negro, que habrían sido utilizadas como "instalaciones" militares por Rusia para reforzar su control en la región.
Se trata del primer ataque del que se tiene noticia contra una infraestructura de hidrocarburos en alta mar en Crimea desde el inicio de la denominada “operación militar especial” de Rusia en Ucrania, el 24 de febrero pasado.
Según Sergei Brachuk, vocero de la región de Odesa en Ucrania, "en esas instalaciones Rusia organizó pequeñas guarniciones y almacenó equipos de defensa aérea, incluidos radares. Es decir, estas plataformas se convirtieron en instalaciones que ya ayudaron y están ayudando a los rusos a reforzar su control total de la parte noroeste del mar Negro".
De acuerdo con Brachuk, en las instalaciones también había herramientas de "reconocimiento" en las plataformas de extracción de gas, situadas a 70 kilómetros de Odesa, principal puerto de Ucrania.
Por su parte, Sergei Aksionov, gobernador instalado por Rusia en Crimea tras su anexión en 2014, también se refirió a la acción ejecutada por militares ucranianos. Al respecto, señaló que los disparos tenían como objetivo tres plataformas de perforación de la empresa Chernomorneftegaz, lo que obligó a evacuar a 94 personas.
Un funcionario ruso había declarado el lunes en la noche que 7 personas de dichas instalaciones estaban desaparecidas.
Entre tanto, Moscú afirmó que rechaza un “nuevo y loco intento” de las fuerzas ucranianas de recuperar la Isla de las Serpientes.
El portavoz del Ministerio de Defensa de Rusia, Igor Konashenkov, indicó que las fuerzas ucranianas "tenían previsto realizar bombardeos aéreos y de artillería masivos (…) antes de desembarcar y capturar" la isla.
Al respecto, aseveró que 15 drones de ataque y de reconocimiento ucraniano habían tomado parte del ataque aéreo y que baterías de lanzamisiles y obuses dispararon hacia la región. No obstante, recalcó que los sistemas de defensa aérea y antimisiles rusos interceptaron todos los proyectiles y derribaron 13 drones, "forzando al enemigo a abandonar cualquier desembarco en la Isla de las Serpientes".
El alto jefe castrense puntualizó que fue tras ese intento de ataque que las fuerzas ucranianas procedieron a bombardear las plataformas de perforación de hidrocarburos en el mar Negro.