Más allá de las muertes que la pandemia de la Covid-19 ha generado en el mundo hasta la fecha aunada a las guerras, ahora una nueva alarma enciende las alertas del mundo.
La Organización de Naciones Unidas advirtió este lunes que, “el mundo está muy cerca de la aniquilación nuclear”.
El encargado de ofrecer detalles de esta información fue el Secretario General del organismo multulateral, Antonio Guterres, durante la apertura de la 10ª Conferencia de los 191 países firmantes del Acuerdo de No Proliferación Nuclear (TNP).
“Con 13.000 armas nucleares en los arsenales, hasta ahora el mundo ha evitado el error suicida de un conflicto nuclear gracias a una combinación de compromiso, juicio y suerte, pero eso puede cambiar”, advirtió.
Hizo énfasis especialmente en la guerra en Ucrania y la amenaza de las armas nucleares a los conflictos en Medio Oriente y Asia, dos regiones al borde de la catástrofe, según el Secretario.
En vísperas del aniversario del lanzamiento de Estados Unidos de las bombas nucleares sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki, el próximo 9 de agosto, Guterres recordó que la humanidad ha olvidado las lecciones de aquellos terroríficos fuegos.
De igual manera, dijo ante los ministros, funcionarios y diplomáticos que asisten a la conferencia para revisar el Tratado de No Proliferación Nuclear que la reunión se lleva a cabo “en un punto crítico para nuestra paz y seguridad colectivas y en un momento de peligro nuclear no visto desde el apogeo de la Guerra Fría”, acotó.
Aprovechó la oportunidad para pedir a los participantes de la conferencia que tomen medidas ante una posible guerra nuclear.
Sugirió que esas medidas pueden ser, reforzar y reafirmar lo establecido en la norma de 77 años contra el uso de armas nucleares, trabajar sin descanso para la eliminación de las armas nucleares con nuevos compromisos de reducir los arsenales, abordar las tensiones latentes en Medio Oriente y Asia y por último promover el uso pacífico de la tecnología nuclear.
Guterres además advirtió que las tensiones internacionales por el conflicto Rusia-Ucrania están "alcanzando nuevos máximos".