Los recientes lanzamientos de misiles norcoreanos son ensayos de sus armas nucleares tácticas para “atacar y arrasar” posibles objetivos surcoreanos y estadounidenses, según publicaron los propios medios estatales del país asiático.
“Las capacidades de guerra reales para atacar y eliminar los objetivos marcados en cualquier momento y lugar quedaron demostradas por entero a través de siete simulacros de lanzamiento de las unidades de operación nuclear táctica”, dijo la Agencia Central de Noticias de Corea (KCNA, en inglés).
El lanzamiento público del misil desde debajo de un reservorio de agua fue el primero de su tipo, anteriormente había sido desde un submarino.
Según la misma fuente, las pruebas de misiles fueron una respuesta a las recientes maniobras navales entre fuerzas estadounidenses y surcoreanas, en las que participó el portaaviones nuclear USS Ronald Reagan por primera vez en cinco años.
De hecho, desde que un nuevo gobierno conservador asumió el cargo en Seúl en mayo pasado, los ambos ejércitos han ampliado sus maniobras.
Corea del Norte considera esos ejercicios como un ensayo de invasión, aunque EE. UU y Corea del Sur han reiterado que son de carácter defensivo.
Las informaciones -publicadas en el 77 aniversario del gobernante Partido de los Trabajadores- se interpretaron en Occidente como un intento de consolidar el apoyo público al líder, Kim Jong-un, principalmente, ante las dificultades económicas asociadas a la pandemia y a la amenaza de seguridad por la reforzada alianza militar entre Washington y Seúl.
