El fundador de la plataforma de criptodivisas FTX –recientemente hundida- Sam Bankman-Fried, dijo en su cuenta de Twitter que lamentaba su decisión de declarar la empresa en quiebra y criticó a los reguladores.
Con un extenso hilo combinado de disculpas, excusas y mensajes “crípticos” intentó explicar qué causó la debacle en la empresa que fundó y dirigió.
“Nos confiamos demasiado y nos descuidamos”, dijo el desarrollador quien aguarda un proceso judicial tras ser señalado como responsable del reciente desplome de las criptomonedas.
Según afirmó, los responsables del proceso al que está sometido FTX “intentan quemarlo todo por vergüenza” y que él tiene dos semanas para recaudar 8 mil millones de dólares y salvar la empresa.
“Básicamente todo lo que importa es captar el dinero”, dijo mientras intercalaba otros mensajes crípticos tales como “ lo que importa es lo que haces: el bien o el mal y no sólo hablar de hacer el bien o usar lenguaje de responsabilidad social empresarial.”
Se desconoce si estos mensajes podrían ayudar o perjudicar su situación legal, pero en sus redes sociales no se muestra preocupado. De hecho, hasta se jactan de haber salido de portada en las principales revistas.
Hay que recordar que FTX se declaró en bancarrota la semana pasada y nombró a cinco nuevos consejeros independientes en cada una de sus principales empresas afiliadas, incluida Alameda Research.
Los cinco nuevos directores y el recién nombrado director general, John J. Ray, están intentando navegar a través del proceso de quiebra.
Desde el 17 de noviembre el nuevo “Director de reestructuración” y CEO de FTX es John Ray III, un abogado que anteriormente supervisó la bancarrota de 23 mil millones de dólares del gigante energético Enron Corp.