Un nuevo reto asumirá Angelina Jolie de la mano del chileno Pablo Larraín, con la interpretación de la película “María”, en homenaje a la vida de la soprano María Callas.
La película repasará la vida de Callas (1923-1977) con sus luces y sombras, pintando su carrera como un recorrido “tumultuoso, bello y trágico” desde sus comienzos hasta sus últimos días en París, durante la década de los 70.
Esta no es la primera vez que Pablo Larraín trabaja en este tipo de proyectos biográficos. En 2016 dirigió a Natalie Portman en "Jackie" y el año pasado hizo lo mismo con Kristen Stewart en "Spencer", cinta basada en la vida de Diana de Gales.
Además de Larraín, que asumirá la dirección, el proyecto ya confirmó el fichaje de Steven Knight (Spencer, Peaky Blinders) para hacerse cargo del guión.
El cineasta expresó su emoción por el proyecto, que une a dos de sus grandes pasiones, el cine y la ópera.
“Hacerlo con Angelina, una artista valiente y curiosa, es una oportunidad fascinante. Un auténtico regalo”, dijo en un comunicado.
Igualmente, el personaje podría darle muchas alegrías a Jolie, pues las dos últimas cintas biográficas que Larraín ha dirigido lograron la nominación al Oscar para sus protagonistas: Kristen Stewart lo consiguió el año pasado por Spencer, basada en la vida de Lady Di; y Natalie Portman hizo lo mismo en 2016 con Jackie, sobre Jackie Kennedy Onassis.
Además, Larraín fue nominado a los premios de la Academia de Hollywood en 2012 por “No”, que supuso la primera candidatura de Chile a Mejor Película Internacional.
La vida de Callas
La soprano nació en EE.UU. pero era de origen griego, Callas fue la cantante de ópera más relevante del siglo XX. Conocida como “La Divina” por su tono de voz soprano y dominio del “bel canto”.
El amplio registro vocal de la artista y su carisma le llevaron a protagonizar todo tipo de obras, como Carmen, Lady Macbeth y Gilda.
Aunque nació en EE.UU., su carrera se desarrolló entre América y Europa. Se formó en Grecia, muy presionada por su madre, y tras saltar por los escenarios de ciudades como Atenas, Chicago y Nueva York, encontró el prestigio en Italia, donde debutó en el imponente Arena de Verona.
A pesar de que el final de su carrera estuvo marcado por el deterioro de su voz, Callas continuó siendo considerada la mujer más importante de la ópera e inspiró la carrera de Montserrat Caballé, Joan Sutherland y Leyla Gencer, entre otros.
