España aprobó la reforma de la ley del aborto, que amplía los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres e incluye nuevas medidas para la anticoncepción.
Así lo dio a conocer Irene Montero, ministra de Igualdad del Gobierno, quien destacó las ventajas que tendrá este marco jurídico. “Las instituciones asumimos la responsabilidad de dejar atrás los estigmas y prejuicios sobre los cuerpos de las mujeres”, indicó la funcionaria.
La norma legal contempla la supresión del consentimiento paterno para las jóvenes de 16 y 17 años que quieran abortar y aplica para mujeres con discapacidad que quieran interrumpir su embarazo sin el permiso de sus padres o tutores.
El instrumento jurídico también estipula que los hospitales públicos deberán contar con personal para practicar abortos. Hasta ahora, este procedimiento sólo se hacía en clínicas privadas. Las mujeres podrán interrumpir su embarazo en el hospital público más cercano a su domicilio y evitar que se desplacen de una provincia a otra con tal fin.
Con la norma, las mujeres tendrán derecho a una incapacidad temporal remunerada para recuperarse tras el aborto; una baja médica pagada para las trabajadoras con menstruaciones muy dolorosas y un permiso preparto a partir de la semana 39 de gestación. Se elimina la obligación de recibir información sobre maternidad y retrasar la decisión tres días a modo de “plazo de reflexión” como requisitos.
La reforma a la ley del aborto contempla además la “corresponsabilidad en la anticoncepción”, haciendo copartícipes a los hombres. Los centros de salud pondrán a disposición la “píldora del día después” de forma gratuita y se prevé la distribución de preservativos y productos para la menstruación en los centros educativos, servicios sociales y prisiones como parte de campañas de educación sexual.
El texto contempla que se lleve a las aulas de clase información sobre derechos sexuales y reproductivos con una perspectiva basada en el consentimiento y en el buen trato. Al respecto, se deberá abordar de forma específica la educación menstrual y hacerlo de una manera “integral” en los centros educativos para intentar combatir “los mitos, prejuicios y estereotipos de género” que genera este tema en los adolescentes.
La ministra Montero señaló que con la Ley de Salud Sexual y Reproductiva e Interrupción Voluntaria del Embarazo, España se sitúa al frente de las políticas europeas en el avance de los derechos sexuales, reproductivos y menstruales de las mujeres. La norma será tramitada por la vía de urgencia.
