Siguen los fashion shows más importantes del mundo y esta vez le tocó el turno a Milán, que en su semana de la moda ha dejado boquiabiertos a los conocedores y fanáticos de la alta costura, con una apertura espectacular y propuestas totalmente disruptivas.
En las pasarelas de la ciudad italiana más glamourosa de todas, desde el 20 de septiembre hasta este lunes 26, se dan cita 167 firmas de modas de las cuales 68 presentarán nuevas colecciones en desfiles presenciales, siete de manera online y el resto están dispuestos en Lombardía.
Adicionalmente, la Cámara de Comercio Italiana introdujo la propuesta llamada Fashion Hub, un encuentro que va más allá de los desfiles y se concentra en reunir propuestas vanguardistas y de calidad, que tomen en cuenta elementos como el uso de materiales nobles con el medio ambiente, el concepto de comercio justo, entre otras cosas.
Reconocidos
Entre las casas de diseño que se presentan en Milán, se encuentran Versace, Moschino, Roberto Cavalli, Prada, y Fendi, este último destacado en Nueva York por el regreso a las pasarelas de la supermodelo canadiense, Linda Evangelista.
Hasta el momento dos de las propuestas que han dado más que hablar han sido Diésel y Moschino, quienes han destacado por salir del molde esperado e invadir las redes sociales con comentarios.
Como “un desfile de moda verdaderamente democrático” fue calificada la puesta en escena de la casa italiana de jeans, creada por Renzo Rosso, quien deleitó a los casi 5000 espectadores, que acudieron el miércoles a presenciar la colección primavera-verano 2023.
Los primeros modelos irrumpieron en la pista, sorteando gigantescos muñecos inflables, que cayeron en el centro del escenario, extendiendo brazos y piernas que invadieron las gradas, e hicieron a las modelos figuras diminutas en movimiento.
Por su parte Moschino llevó diseños completamente diferentes, con el flotador como eje central de la creación que además surge en tono burlesco a lo tradicional, que puso en boca de todos al director creativo de la firma, el estadounidense Jeremy Scott.
Con la exageración en creaciones que podrían ser calificadas de absurdas, la casa italiana presentó una idea lúdica en la que “los escotes y los bordes de la ropa se hinchan por todas partes como si fueran protuberancias. Las chaquetas de plástico rosas o amarillas están llenas de aire para conseguir un efecto de mascota Michelín, las mangas de un vestido de noche adoptan la forma de dos delfines de goma de colores que saltan fuera del agua, desde las muñecas hasta los hombros” como describió el portal web Fashion Network.
También se presentó en pasarela Hugo Boss, que hizo un homenaje a la ópera tradicional china en sus creaciones. El diseñador presentó “principalmente trajes y capotes pesados de sábanas de lana y tejidos masculinos en cincuenta (o más) tonos de gris pero también beige, blanco y negro, usados tanto por hombres como por mujeres”.
Sin embargo la noticia más esperada, fue la designación del británico de 26 años, Harris Reed, como director creativo de Nina Ricci, lo que lo convierte en el más joven al mando de la firma francesa.
El Milán Fashion Week surge justo después de terminadas las jornadas de las semanas de la moda en Nueva York y Londres, donde se reunieron diseñadores y espectadores por primera vez en dos años, después de la pandemia.
