El mundo de la geopolítica está en plena crisis. Se filtró una grabación en la que el presidente Yoon de Corea del Sur habló con sus ayudantes sin percibir que su micrófono seguía encendido y dijo algo sobre la Asamblea Nacional.
Este hecho ocurrió durante un acto del Fondo Mundial en Nueva York, en el que participaron el presidente Yoon y su homólogo estadounidense Joe Biden el pasado miércoles 21 de septiembre.
En el vídeo, se puede escuchar como Yoon dice: "¿Qué hará Biden si estos cabrones no lo aprueban en el Congreso? Fue tal la repercusión que la palabra “cabrones” se convirtió en tendencia número uno en el Twitter asiático el jueves 22 de septiembre.
La frase pronunciada por el mandatario surcoreano se refiere al intento de Biden de aumentar la contribución estadounidense al Fondo Mundial, un hecho que requiere la aprobación del Congreso.
Sin embargo, el portavoz del presidente Yoon Kim Eun Hye, afirmó que el presidente no tenía ninguna razón para hablar de Estados Unidos o de pronunciar la palabra Biden ya que estaba utilizando una palabra coreana que suena similar al nombre del mandatario estadounidense, además de explicar qué se refería a los legisladores de su país y no a los otros.
En la alocución, el presidente Suf Yeol prometió que su país tendría una mayor contribución al Fondo Mundial y que se espera una gran batalla política para que los legisladores surcoreanos lo aprueben.
No todo podía quedar en calma o suponer que con una disculpa bastaría. Un parlamentario surcoreano sugirió que la cadena de televisión que transmitió el vídeo del presidente debería ser procesada ya que habría dañado la gran alianza entre Estados Unidos y Corea del Sur. Otro parlamentario afirmó que escuchó al menos diez veces el vídeo y que el presidente Yoon Suf Yeol se refirió a su homólogo Biden y que además, llamó a los surcoreanos “discapacitados auditivos”.
Todo esto sucede en el peor momento político entre estos socios y aliados estratégicos. Estados Unidos es clave para la seguridad de Corea del Sur. Washington envió 27.000 soldados para ayudar al contraataque de las Armas Nucleares de Corea del Norte.
