El director ejecutivo de la Agencia Internacional de Energía, Fatih Birol, alertó que la crisis energética actual (petróleo, gas y electricidad) es “mucho más grande que la ocurrida en la década de 1970”. Además, añadió que también duraría más.
Birol teme que la contracción de los mercados petroleros se note en las estaciones de servicio e incluso en la aviación antes de que termine el año 2022.
“Cuando comience la temporada navideña en Europa y Estados Unidos la demanda de combustible aumentará. Entonces podríamos ver escasez en diésel y gasolina particularmente en Europa”, dijo.
La escasez comenzará si las cosas no cambian en las próximas semanas.
El máximo responsable de la IEA recordó que en la crisis de la década del 70 sólo se trataba de petróleo.
“Ahora tenemos una crisis de petróleo, de gas y de electricidad simultáneamente. Algunos países como China están imponiendo sus primeras prohibiciones a las exportaciones, Quieren proteger a sus propios consumidores”, explicó.
Analistas consideran que la verdadera magnitud de la crisis energética es aún desconocida.
Recordemos que la crisis de los 70 (1973-1979) llegó tras la decisión de la OPEP de embargar las exportaciones de petróleo a los países que habían apoyado a Israel durante la guerra de Yom Kipur.
En esta ocasión, el detonante de la crisis energética global ha sido la invasión rusa a Ucrania ocurrida el pasado 24 de febrero.
La segunda crisis llegó en 1979 a consecuencia de los efectos de la revolución iraní y de la guerra entre Irán e Irak. Desde mediados de 1978 hasta 1981, el precio del petróleo se multiplicó por 2,7. Debido a esta circunstancia, debieron adoptarse restricciones al consumo en varios países del mundo.