Israel expulsará a “terroristas palestinos” a Cisjordania
En plena escalada del conflicto, Israel endurece las medidas que castigan a palestinos implicados en ataques a Jerusalén ocupada. Los palestinos serían expulsados a zonas de Cisjordania ocupada bajo autogobierno de la Autoridad Nacional Palestina (ANP).
Además, el gobierno de Israel anunció esta tarde que aplicará medidas para que se pueda despedir a trabajadores «que han apoyado el terrorismo» sin necesidad de que el despido se valide en una vista judicial.
Tras su primera reunión anoche, el Gabinete de Seguridad anunció que el gobierno nacional retiraría el derecho a la seguridad social «a los familiares de terroristas que apoyan el terrorismo», y avanzó un plan para «legislar la revocación de sus documentos de identidad».
La coalición de Netanyahu, que incluye a partidos de ultraderecha que exigen mano dura y mayor contundencia con los palestinos pretende impulsar estas medidas para «fortalecer la disuasión perjudicando el entorno inmediato» de los atacantes.
Hay que recordar que la actual escalada de violencia se disparó la semana pasada con una incursión militar israelí en la ciudad de Yenín, en Cisjordania ocupada, que se saldó con la muerte de 10 palestinos.
Según los medios israelíes, la respuesta palestina fue el ataque a una sinagoga en una colonia israelí de Jerusalén Este ocupado, donde murieron siete israelíes. En otro hecho, un menor palestino hirió con un arma de fuego a dos israelíes en la Ciudad Santa.
En respuesta, el Gobierno demolió las residencias familiares de los atacantes palestinos lo que constituye un cambio en la política de Israel en este ámbito: sus fuerzas suelen demoler o precintar como represalia las casas de palestinos que mataron a israelíes, acciones tachadas de castigo colectivo por grupos de derechos humanos.
Estos pasos fueron condenados por el grupo islamista Hamás, que los consideró como parte «de una miserable política de castigo».