El ministro de Desarrollo Rural y Tierras de Bolivia, Remmy Gonzales, informó este domingo que más de 2.800 comunidades atraviesan una intensa sequía que afecta a zonas extensas en el occidente del país y que, en contraste, más de 21.000 hectáreas de cultivos se perdieron por las fuertes lluvias en el oriente de la nación.
En declaraciones a la prensa, Gonzales aseguró que se está coordinando la entrega de al menos 234 pozos de agua para que las comunidades no se vean afectadas por este fenómeno natural.
El ministro aseveró que el Gobierno nacional dotó a 74 municipios de toda la maquinaria y logística para la recolección de agua que pueda utilizarse en el sistema de riego o para consumo animal.
El alto funcionario recalcó que el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) prevé que la sequía continuará afectado al país sudamericano hasta el primer trimestre del año, por lo que instó a la población en general a adoptar nuevas medidas para cuidar el vital líquido.
Mientras que en el oriente y parte de la Amazonia boliviana se pronostican intensas lluvias con inundaciones en algunos casos. En la región de Santa Cruz, más de 12 municipios han sido afectados con las constantes precipitaciones y seis han declarado estado de emergencia.
En este punto, González lamentó la pérdida de 21.000 hectáreas de cultivo de diversos rubros alimenticios, no obstante, aclaró que esto sólo representa el 0,3% de la superficie de cultivos en la región, por lo que la seguridad alimentaria «está garantizada».
El titular de tierras aseguró la compra de semillas para la «resiembra», de papa y soya, insumos agrícolas y fertilizantes para los campesinos afectados por esta situación.
Hasta los momentos, la administración de Luis Arce ha presupuestado 16 millones de dólares en el programa nacional para enfrentar la sequía debido al fenómeno de la Niña, el cual está desde el año 2020, y se ha extendido hasta la fecha, retrasando las lluvias en varias regiones de la nación sudamericana.