Como cada año, el Instituto Pantone -reconocido como la fuente principal de conocimientos, significados y soluciones enfocadas al uso del color- presentó el Color of the Year 2023 y resultó electo el magenta (Viva Magenta 18-1750): un color descrito como poco “convencional” y es que, de hecho, no existe en la naturaleza.
Según la información del veredicto, el proceso de Pantone para seleccionar el color magenta como aquel que se encuentra más en sintonía con el espíritu del momento, “combinó investigación metódica e instinto”.
Destaca la información que Pantone tomó en cuenta la enorme popularidad del magenta en los mundos de la moda, cosmética, autos conceptuales, arte digital y las redes sociales.
La selección de este color es un ejercicio de antropología, aseguró la directora ejecutiva del Pantone Color Institute, Leatrice Eiseman. “Es valiente, temerario, palpitante y llama al optimismo y la alegría”, puntualizó.
Informó además que, como resultado de esta selección, ahora Pantone explora la dinámica entre la inteligencia artificial y la creatividad humana a través del Magentaverso. Una exhibición dirigida por el estudio de arte y tecnología ArtecHouse, presentada en Miami, y con salas interactivas vinculadas al Magenta.
Para quienes no tienen muy claro “cómo” es el magenta podemos resumir que se trata de un rojo carmesí animado y electrizante.
“Es un equilibrio entre lo cálido y lo frío, por lo que el magenta es un color híbrido que combina lo físico y lo virtual, evocando un mundo multidimensional capaz de crear un futuro más positivo”, aseguran los organizadores de la exposición.
Aunque “no existe” lo vemos
Nuestros ojos detectan el color a través de diversos tipos de conos -unas células especializadas en el centro de la retina- tipo L, M y S, y perciben los azules; los verdes y los rojos. Sus respuestas se combinan y se convierten en un mensaje eléctrico que se envía a lo largo del nervio óptico al cerebro como una sola señal y da como resultado los colores que conocemos.
Sin embargo, oficialmente el magenta no existe, es decir, no hay una longitud de onda de luz para el magenta y lo percibimos sólo cuando los conos S y L captan una señal especial de luz roja y azul pura.
Es decir, la luz magenta no puede ser generada por una sola longitud de onda lumínica, por lo cual no está en el espectro de luz visible: es un color llamado extra–espectral. No existe en la naturaleza.
Hasta el momento los científicos no pueden explicar por qué este color solo “aparece” bajo un determinado proceso de percepción.
