Italia se ha convertido en el primer país del mundo en prohibir el uso del prototipo de chatbot de inteligencia artificial ChatGPT -según un comunicado publicado este viernes por el Garante para la Protección de Datos Personales (GPDP)- por la recopilación de datos personales de manera ilegal y por la ausencia de sistemas para verificar la edad.
El organismo ordenó a OpenAI la limitación temporal del procesamiento de datos de usuarios italianos con efecto inmediato, y abrió una investigación al respecto. También recomendó a la gente evitar su uso hasta que respete la normativa de privacidad vigente.
Todo responde a que el pasado 20 de marzo el popular chatbot sufrió una fuga de datos de las conversaciones generadas con los usuarios e información relativa al cobro de los suscriptores del servicio por pago.
Desde el GPDP denuncian la falta información para los usuarios y para todas las partes interesadas y cuyos datos son recopilados por OpenAI.
“No hay una base legal que justifique la recopilación y almacenamiento masivo de datos con el propósito de entrenar los algoritmos que subyacen al funcionamiento de la plataforma”, dice.
Además, las autoridades italianas denuncian que, pese a que el servicio está dirigido a personas mayores de 13 años, no existe filtro alguno para verificar la edad de los usuarios, lo cual expone a los menores a respuestas «absolutamente inadecuadas» teniendo en cuenta su «grado de desarrollo y autoconciencia».
Italia le dio a la empresa con sede en California un plazo de 20 días para comunicar las medidas que adopte para subsanar estos problemas y, de no ser así, deberá pagar una multa de hasta 21,7 millones de dólares o hasta 4% de su facturación global anual.