Muchas son las inquietudes alrededor de las enfermedades cardíacas, y aún más cuando quienes la padecen son personas jóvenes, con un promedio entre los 30 y 38 años; expertos aseguran que son consideradas enfermedades silenciosas con altos índices de muertes prematuras.
En el caso del (IM) o Infarto de Miocardio, se puede determinar que no es más que un tipo de Cardiopatía Isquémica, es decir, una enfermedad provocada por el deterioro y la obstrucción de las arterias del corazón.
Ésta se produce debido a la acumulación de placas de colesterol y células inflamatorias en las paredes de las arterias, lo que provoca que el corazón no reciba sangre suficiente.
Según varios estudios, cualquier persona puede sufrir un Infarto de Miocardio, sin importar su edad ni sus condiciones físicas y no todas tienen el mismo riesgo, es decir, tienen más probabilidades aquellas personas que han sufrido un evento cardiovascular previo.
Algunas causas de este tipo de infarto están vinculadas con previos episodios de Arteriosclerosis, Atero-trombosis, enfermedades crónicas de corazón, como las arritmias y la insuficiencia cardíaca y factores de riesgo como la hipertensión, la diabetes, un estilo de vida sedentario, el tabaquismo, etc.
Por estas razones estos episodios cardíacos se pueden ver en pacientes jóvenes, quienes no llevan un control médico regular, no guardan una buena dieta y regularmente sufren de excesos en el consumo de cigarros, tabacos y alcohol.
Los síntomas asociados al IM pueden manifestarse en distintas combinaciones y son muy parecidos a los de la Angina de Pecho pero de distinta intensidad y duración.
El síntoma más común e inmediato es un dolor muy fuerte y una opresión en el pecho, que puede aparecer de forma brusca y en ocasiones, acompañado de dolor en otras partes del cuerpo, como la mandíbula, cuello, espalda, brazo izquierdo y la zona abdominal.
El dolor no desaparece en reposo, ni varía con movimientos ni con la respiración.
Del mismo modo se puede llegar a sentir mareos intensos, sudor, cansancio inexplicable, latidos anormales del corazón, dificultad para respirar, náuseas y vómitos.
La Medicina tradicional recomienda para evitar un episodio agudo de IM, sostener una alimentación sana, realizar 30 minutos de actividad física todos los días, controlar enfermedades como la obesidad, diabetes, mellitus, hipertensión arterial y dislipidemias.
También es importante dormir 8 horas diarias, evitar el estrés y abandonar el tabaquismo.
Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el infarto de miocardio es la principal causa de muerte en México y en el mundo.