El Gobierno italiano anunció que entrará en fase de estado de emergencia nacional migratorio durante los próximos seis meses, tras el desembarco en las costas italianas de más de 3.000 personas en esta última semana.
La medida fue propuesta por el ministro de Protección Civil y Políticas Marítimas, Nello Musumeci, quie aseguró que el aumento del flujo de migrantes a través de las rutas del Mediterráneo se ha convertido en un caso excepcional.
Asimismo detalló que la posible solución del problema migratorio sólo está vinculada a una intervención consciente y responsable de la Unión Europea.
Según medios locales cerca de un millar de migrantes llegaron a Lampedusa, de los cuales una gran parte eran menores de edad, lo que alarmó a las autoridades y los llevó a decretar estado de emergencia.
La medida estará vigente por seis meses y dotará a las estructuras estatales de cinco millones de euros provenientes del Fondo de Emergencias Nacionales con el objetivo de facilitar los procesos migratorios.
Del mismo modo, el gobierno Italiano busca reforzar las herramientas de repatriación y expulsión.
«Nos hemos adherido gustosamente a la petición(..) y de manera muy consciente de la gravedad de un fenómeno que aumenta un 300%», puntualizó Nello Musumeci.
Se espera en los próximos días que el gobierno Italiano brinde mayores detalles de la medida y de los casos migratorios existentes en el país.