El Centro de Estudios sobre el Judaísmo Europeo Contemporáneo de la Universidad de Tel Aviv y la Liga Antidifamación publicaron un informe que revela que la pandemia del coronavirus provocó un aumento del antisemitismo mundial: “2022 no marcó un revés en la tendencia, y en algunos países, de manera más alarmante en Estados Unidos, se ha intensificado”.
El reporte del año pasado halló que 2021 fue un año récord para incidentes antisemitas, a pesar de que en otros países con grandes comunidades judías —como Francia, Canadá, Argentina y el Reino Unido— el número de incidentes antisemitas disminuyó.
“La Liga Antidifamación halló que la cantidad de incidentes antisemitas en Estados Unidos aumentó en más de 35% en el año pasado, de 2.721 en 2021 a 3.697 en 2022. La propaganda antisemita y de supremacistas blancos también alcanzó niveles inéditos”, dijo la organización.
Detalló que aumentaron los crímenes de odio antisemita en Nueva York, Los Ángeles y Chicago, donde están las tres comunidades judías más grandes del país.
El reporte halló que judíos visiblemente identificables, particularmente los ultraortodoxos, también conocidos como los haredim, fueron las principales víctimas de la violencia antisemita en Occidente.
“Los judíos haredim son las víctimas principales no solo porque son fácilmente identificables como judíos, sino también porque se les percibe como vulnerables y poco propensos a defenderse”, dice el reporte.
Cabe destacar que el aumento del antisemitismo en Estados Unidos no se limita a supremacistas blancos: el reporte añade que “los antisemitismos de la extrema derecha y de la extrema izquierda se están filtrando en la cultura y la política de Estados Unidos desde ambos lados”.