El hombre de 84 años que le disparó a Ralph Yarl cuando el adolescente negro llamó a su puerta por error, se declaró inocente el miércoles en un caso que conmocionó al país y renovó los debates nacionales sobre las políticas de armas y la raza en América.

Andrew Lester entró a la sala del tribunal con un bastón y habló en voz baja durante la audiencia del miércoles, su primera aparición pública desde el tiroteo de la semana pasada. 

Las autoridades dicen que le disparó a Yarl, un estudiante de honor de 16 años, primero en la cabeza y luego en el brazo después de que Yarl llegó a su puerta porque había confundido la dirección con la casa donde se suponía que debía recoger a sus hermanos menores.

El caso es uno de los tres de los últimos días que involucran a jóvenes que recibieron disparos después de aparecer por error en los lugares equivocados. Una mujer de 20 años murió en el norte del estado de Nueva York cuando el automóvil en el que viajaba entró en el camino equivocado. 

En Texas, dos porristas recibieron disparos después de que una de ellas se subiera a un automóvil por error pensando que era el suyo.

Yarl recibió un disparo a quemarropa en la cabeza, pero sobrevivió milagrosamente a la bala. Solo alrededor del 10% al 15% de las personas que reciben un disparo en la cabeza sobreviven, dijo el Dr. Christopher Kang, presidente del Colegio Estadounidense de Médicos de Emergencia.

Reacciones

Algunos líderes de derechos civiles y el abogado de la familia de Yarl, Lee Merritt, han instado al Departamento de Justicia a investigar el tiroteo y a que los fiscales acusen a Lester de un crimen de odio, y Merritt señaló que Yarl «estaba armado solo con su piel negra».

Los funcionarios del Departamento de Justicia no han respondido a las llamadas en busca de comentarios.

El fiscal del condado de Clay, Zachary Thompson, dijo que la agresión en primer grado es un delito de mayor nivel, que permite una sentencia de hasta cadena perpetua, que es más de lo que conllevaría un cargo de delito de odio.

Lester permanece libre después de pagar $20,000, el 10% de su fianza de $200,000, y aceptar renunciar a cualquier arma y no tener contacto con Yarl o su familia. También accedió a que monitorearan su teléfono celular.

Los familiares de Yarl no estuvieron en la audiencia del miércoles porque están emocionalmente exhaustos, dijo Merritt. El abogado de Lester, Steve Salmon, no salió del juzgado para hablar con los reporteros.

Merritt dijo que Yarl está «completamente honrado» por la gran cantidad de apoyo.

“Él dice, ‘No sé por qué todos me están dando tanta importancia’”, dijo Merritt. “Sabes, soy solo yo, ¿verdad? No es como si le hubieran disparado al presidente”.

Pero Eliana Brannlund dijo que ha sido difícil no tener a su amiga y compañera de banda en Staley High School.

“Siempre trajo mucha positividad y sonrisas a nuestra clase de banda, así como a nuestros ensayos fuera de la escuela”, dijo Brannlund en una entrevista con The Associated Press. “Espero que la gente pueda escuchar quién es Ralph como persona y entender que es amoroso, amable y dulce”.

Los hechos

Yarl recibió un disparo alrededor de las 10 pm el jueves pasado después de que su madre le pidiera que recogiera a sus hermanos gemelos en una casa en 115th Terrace, dijo la jefa de policía Stacey Graves.

Yarl, quien es miembro de la banda de todo el estado y también un estudiante destacado, fue por error a la calle 115, a una cuadra de donde pretendía estar. Cuando tocó el timbre, Lester llegó a la puerta y usó un revólver Smith and Wesson 1888 calibre .32 para dispararle al adolescente.

Lester le dijo a la policía que vive solo y que estaba “muerto de miedo” cuando vio a Yarl en el porche porque pensó que alguien estaba tratando de entrar, dijo la policía en documentos judiciales.

No hubo intercambio de palabras antes del tiroteo, pero después, cuando Yarl se levantó para correr, escuchó a Lester gritar: “No vengas por aquí”, dice el comunicado.

Yarl corrió a varias casas pidiendo ayuda antes de encontrar a alguien que llamara a la policía, según documentos judiciales.

Los expertos legales esperan que Lester alegue defensa propia y cite la ley «Stand Your Ground» de Missouri. El estado es uno de los 30 con un estatuto que dicen que las personas no tienen que retirarse cuando se sienten amenazadas, sino que pueden responder con fuerza física.

Pero Merritt dijo que la ley se aplica solo si “alguien está en su propiedad y está buscando hacerle daño… No tenemos ninguna evidencia de eso. La Doctrina del Castillo no se aplica a este caso”.

El tiroteo indignó a muchos en Kansas City y en todo el país. El presidente Joe Biden habló con Yarl el lunes y el martes lo invitó a la Casa Blanca.

“Ningún padre debería tener que preocuparse de que le disparen a su hijo después de tocar el timbre equivocado”, tuiteó Biden. “Tenemos que mantener la lucha contra la violencia armada”.

El gobernador republicano Mike Parson, que permaneció en silencio sobre el tiroteo hasta el miércoles, acusó a Biden de politizarlo.

«No quiero que le disparen a un chico de 16 años porque fue a la casa equivocada, simplemente no queremos que sucedan ese tipo de cosas. Es una tragedia”, dijo Parson al Kansas City Star . “Cuando el presidente de los Estados Unidos está tratando de hacer una declaración política sobre una tragedia muy grave, es muy desafortunado”.

Thompson, el fiscal, dijo el lunes que hubo un “componente racial” en el tiroteo, pero no dio más detalles. Merritt dijo que la familia Yarl se reunió en privado con Thompson. 

El fiscal dijo que estaba “haciéndose eco de las palabras de las fuerzas del orden público de que obviamente hay una dinámica racial en juego en este caso”, y calificó la respuesta de “superficial”.

La próxima cita en la corte de Lester es el 1 de junio.

“De ahora en adelante, el estado presionará para que este caso avance tan rápido como lo permita la ley”, dijo Thompson en un comunicado después de la audiencia del miércoles.

Pero Merritt dijo que la familia de Yarl está frustrada porque Lester está en libertad bajo fianza y que la próxima audiencia en la corte no es hasta junio.

“Queremos que este proceso avance lo más rápido posible”, dijo Merritt. “Y sabemos que si un acusado está en libertad bajo fianza, puede sentirse libre de retrasar un poco más la fecha en lugar de si estuviera bajo custodia”.

Fuente: AP.