La Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó este lunes sobre los “elevados” riesgos biológicos tras la ocupación de un laboratorio nacional de salud en Sudán, después de los continuos enfrentamientos entre el Ejército y el grupo rebelde de las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF).
«Ayer recibí una llamada telefónica del jefe del laboratorio central de salud pública. Está ocupado por una de las partes beligerantes y plantea un riesgo biológico muy elevado», afirmó la representante de la OMS en Sudán, Nima Saeed Abid, durante una rueda de prensa en Ginebra.
Abid resaltó que en las instalaciones hay muestras de patógenos como el sarampión, el cólera y la poliomielitis.
El sarampión es causado por un virus de la familia de los paramixovirus y normalmente se suele transmitir a través del contacto directo y del aire. El virus infecta el tracto respiratorio y se extiende al resto del organismo.
Mientras que el cólera es una enfermedad bacteriana, generalmente transmitida por el agua, que provoca diarrea y deshidratación severas que podría ser mortal en cuestión de horas si no recibe tratamiento.
La poliomielitis es una enfermedad causada por un virus que afecta principalmente a los nervios de la médula espinal o del tronco cerebral. En su forma más grave, la polio puede hacer que una persona sea incapaz de mover ciertas extremidades, lo que también se denomina parálisis.
A juicio de la representante de la máxima organización de la salud, en la actualidad no se permite el acceso a los técnicos de laboratorio, para que puedan contener de manera segura el material y las sustancias disponibles en el país del continente africano.
Durante su intervención Abid no especificó qué ejército ocupó las instalaciones, aunque todo apunta a que el RSF controla el recinto.
Tregua momentánea
Este martes, cientos de sudaneses aprovecharon una nueva tregua anunciada a partir de la noche de este lunes, con la mediación de Estados Unidos, para abastecerse de agua y alimentos no perecederos en medio de la crisis política que vive el país.
Otros sudaneses optaron por salir de las zonas de conflicto a lugares más seguros o emigrar a países como Egipto, Libia, Chad, República Centroafricana, Sudán del Sur, Etiopía o Eritrea
Mientras tanto, el Comité Central de Médicos de Sudán elevó a 291 los civiles muertos desde el inicio del conflicto armado, este dato dista a la cifra anunciada por la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), que informó más de 400 fallecidos y 3.500 heridos.