Este viernes, los franceses tomaron las calles para expresar el rechazo a los accidentes mortales en el trabajo, además de mostrar que estaban a favor de la retirada de la reforma de las pensiones.
Durante la jornada de manifestaciones, los franceses iniciaron un incendio y bloquearon el lugar en el que se construye la futura piscina olímpica de los Juegos París 2024.
«Sin respuesta del Gobierno sobre la reforma de pensiones, no hay Olimpiada«, gritaban a la vez los protestantes.
La secretaria general de la Confederación General del Trabajo (CGT), Sophie Binet, pidió el restablecimiento de los comités de salud, seguridad y condiciones de trabajo, los cuales fueron revocados por el presidente, Emmanuel Macron hace cinco años.
‘’Se deben sancionar a las empresas que no cumplan con las normas de prevención’’, señaló la ejecutiva con respecto a los accidentes laborales que han ocasionado el fallecimiento de algunos franceses.
Francia es el país de la Unión Europa que más ha registrado accidentes mortales durante el trabajo.
‘’En vez de trabajar en estos temas de prevención, en vez de actuar contra los accidentes y muertes en el trabajo, el Gobierno y los empleadores nos quieren imponer una reforma injusta y obligarnos a trabajar dos años más, robarnos dos años de vida’’, criticó, refiriéndose al polémico proyecto de ley que pretende aumentar la edad de jubilación de los 62 a los 64 años.
Asimismo, las autoridades francesas prohibieron las acciones sindicalistas convocadas antes de la final de la Copa de Francia, a disputarse este sábado.
La concentración tenía como objetivo repartir entre el público que asistiría al partido, silbatos y tarjetas rojas con la inscripción ‘’Tarjeta roja a la jubilación a los 64 años’’, contra la ley impuesta por el mandatario.
