La Policía Federal de Brasil (PF) allanó este miércoles la residencia del expresidente Jair Bolsonaro, en la capital Brasilia, como parte de una investigación de una presunta falsificación de certificados de vacunación contra la Covid-19.
Así lo informó el ministro del Supremo Tribunal Federal (STF), Alexandre de Moraes, quien autorizó el operativo denominado “Venire” en la que hay 16 órdenes de registro y detenciones en al menos dos ciudades del país.
En este sentido, varios medios de comunicación informaron que el exmandatario declarará en la sede de la PF mientras que uno de sus aliados más cercanos, Mauro Cid, fue arrestado.
Bolsonaro confirmó el allanamiento en su residencia en declaraciones ante los reporteros, y su esposa Michelle lo hizo a través de su cuenta de Instagram, resaltando que el teléfono del exmandatario no fue incautado, contrario a los primeros reportes publicados.
“No hubo ninguna adulteración de mi parte, no ocurrió”, afirmó el expresidente a los medios de comunicación.
Una nota de la PF afirmó que se investiga una “asociación delictiva formada para cometer los delitos de inserción de datos falsos de vacunación contra el Covid-19 en los sistemas del Ministerio de Salud”.
Hasta los momentos se mantiene la sospecha de que las constancias de vacunación de Bolsonaro y su familia habían sido alteradas.
Durante los meses de la pandemia global de la Covid-19, el exmandatario expresó en más de una ocasión sus dudas sobre la eficacia de la vacuna.
En septiembre de 2021, Bolsonaro generó polémica al ingresar al edificio de las Naciones Unidas para la 76° Asamblea General, ya que todos los mandatarios y personalidades debían estar vacunados.
Sin embargo, el expresidente llegó a Nueva York sin ese requisito.
Este hecho sin precedentes en el país sudamericano ha puesto en el ojo del huracán a Bolsonaro. Las autoridades han interrogado al ex jefe de Estado en dos ocasiones en el último mes por otras investigaciones.
El primer caso es por un conjunto de joyas con diamantes que recibió como regalo de Arabia Saudí y por su posible participación en los actos vandálicos durante la toma de las sedes de los poderes públicos el pasado 8 de enero.
También se le investiga por sus declaraciones sobre un supuesto fraude electoral en los últimos comicios presidenciales, en los que salió victorioso el candidato Luiz Inácio Lula da Silva.