La Organización Mundial de la Salud (OMS), advirtió a través de un informe que la mortalidad infantil y la materna se han reducido un 50% y un 34% respectivamente desde el año 2000 en el mundo, sin embargo, hay un estancamiento en este progreso.
El máximo organismo de la salud alertó que esta situación afecta a más de 4,5 millones de madres y bebés.
Según el estudio de la OMS, cada año unas 290.000 mujeres mueren en el parto, 2,3 millones de bebés fallecen en el primer mes de vida y se interrumpe el embarazo de forma involuntaria para otros 1,9 millones pasadas las 28 semanas de gestación.
Ante este escenario, el responsable de salud materna e infantil de la OMS, Anshu Banerjee, indicó que las mujeres y los bebés siguen falleciendo de manera alarmante en el mundo y que sumando a la pandemia de la Covid-19, se ha obstaculizado aún más, el acceso sanitario necesario que necesitan.
El documento resalta que desde el año 2018 que en algunas regiones de África subsahariana dónde se desarrollan algunos conflictos bélicos, muestra un retroceso en el acceso oportuno de asistencia médica a madres y recién nacidos.
La OMS lamenta que en la actualidad uno de 10 diez centros hospitalarios en el mundo puede tener fondos presupuestarios para atender este tipo de situación, que empeoró con la llegada de la pandemia, en donde muchos países redireccionaron sus gastos en la adquisición de vacunas y otros equipos.
Esto ocasionó que otras áreas esenciales como las unidades de cuidados intensivos para bebés pasaran a un segundo plano.
«Dos tercios de las instalaciones para el parto en África subsahariana no son plenamente funcionales, en el sentido de que carecen de recursos esenciales tales como medicamentos, agua potable, electricidad o plantilla disponible las 24 horas», subrayó la OMS en el documento.
La publicación puntualiza que al menos 60% de las embarazadas en África subsahariana y el sur de Asia, reciben menos de cuatro chequeos previos al parto, cuando el máximo organismo de la salud recomienda hasta ocho.
Estas regiones presentan el número de mortalidad materna e infantil en el mundo.
