La Organización de las Naciones Unidas (ONU) aprobó un presupuesto de emergencia calculado en nueve millones de dólares para responder el grave deterioro de la crisis humanitaria en Haití y a la falta de apoyo de los donantes.
El Fondo Central de Respuesta a Emergencias fue aprobado por el jefe humanitario de la organización, Martin Griffiths.
Al menos 1.446 personas han fallecido en la ola de violencia que sufre la isla en los primeros cuatro meses de este año y más de 100.000 menores están en riesgo por desnutrición grave, según alertó Unicef.
El secretario general de la ONU, António Guterres, se reunió con el primer ministro de Jamaica, Andrew Holness -en una visita a Kingston, la capital- e hizo un llamado a la comunidad internacional a tomar medidas contra la creciente violencia de las pandillas en Haití, que “compromete la seguridad del Caribe”.
Guterres dijo que el problema de la inseguridad e insalubridad en Haití suponen un reto que sobrepasa el ámbito regional y lamentó la “reticencia” de los países occidentales “quienes tienen mayor capacidad para llevar a cabo este tipo de operaciones, yo diría de intervención, porque se trata más de una operación policial”.
El jefe de la ONU consideró que la mejor manera de superar esa reticencia es establecer un proceso político creíble, en referencia a la organización de elecciones legislativas y presidenciales en Haití.
Las últimas elecciones en el país fueron en 2016 y fue cuestionada la legitimidad del primer ministro Ariel Henry, cuya designación se dió apenas dos días después, del asesinato del presidente Jovenel Moïse en julio de 2021.
