Este martes en la noche, el príncipe Harry y su esposa Meghan Markle estuvieron involucrados en una persecución automovilística “casi catastrófica» con paparazzis en la ciudad de Nueva York, EEUU, según informó el portavoz del miembro real británico.
Los hechos sucedieron después de que la pareja junto a la madre de la actriz, Doria Ragland, asistieron a la entrega de premios de la Ms. Foundation for Women, en la que Markle era una de las galardonadas.
Según las primeras investigaciones, la persecución comenzó cuando la pareja con la madre de Markle, subieron a un taxi y comenzó una persecución que se prolongó por más de dos horas.
Esto desencadenó una serie de pequeños accidentes entre conductores, peatones y oficiales del Departamento de Policía de Nueva York, ya que los paparazzis perseguían el vehículo en el que viajaba el hijo menor del Rey Carlos III, con carros, motocicletas, bicicletas y scooters.
Incluso, debido a estos dos últimos medios de transporte pudieron mantener la persecución, saltándose varias luces rojas de los semáforos, manejando de manera provocadora en las aceras y en algunos casos, manejando en contravía.
En un vídeo publicado por la revista TMZ, se aprecia a la pareja en el asiento trasero del vehículo, que se encuentra detenido en la calle. En ese momento los fotógrafos se acercan al taxi para fotografiarlos, lo cual provoca la reacción de un guardaespaldas, que se baja del asiento del copiloto para alejar a los reporteros.
En el interior del carro se puede ver a Harry grabando la escena con su teléfono celular, poco antes de que el taxi abandone la zona a toda velocidad, escoltado por dos patrullas de la policía.
Luego del episodio, las figuras se refugiaron en una estación policial antes de ir a su residencia.
No es la primera vez que la pareja sufre persecuciones por parte de los fotógrafos, y recuerda, el mismo acoso que sufrió Diana de Gales, quien falleció en un accidente de tránsito en circunstancias similares en 1997.
