Un hecho que impresionó al mundo hace una semana tuvo el desenlace esperado, la mujer de Ecuador que despertó en su funeral, finalmente murió después de varios días de agonía.
Bella Montoya de 76 años falleció este viernes tras haber permanecido en la unidad de cuidados críticos del Hospital General Martín Icaza de la ciudad costera de Babahoyo, provincia de Los Ríos, con evento cerebrovascular isquémico.
“Recibió durante su estancia hospitalaria la atención médica integral y evaluación periódica por parte de especialistas del hospital. Asimismo, se desarrolló la respectiva auditoría médica para este caso”, dijo el Ministerio de Salud Pública en un comunicado.
La mujer se hizo famosa cuando despertó en pleno funeral y los días siguientes empeoró, dijo su hijo Gilbert Barberán.
“Sí, mi mamá murió a las 5:00 de la tarde. Ya la estamos velando”, dijo y precisó que debe hacer nuevos trámites en el Registro Civil para registrar por segunda vez la muerte de su madre.
Por otra parte, Zeneida Leal, hija de Montoya, contó a CNN que su mamá empeoró durante los últimos días luego de que despertó del funeral y fue ingresada a cuidados críticos.
“El doctor dijo que mi mamá estaba mal. Que ella estaba muy delicada. Que ella estaba sufriendo de insuficiencia renal. Que no se podía salvar porque todo se estaba complicando y le dio un paro respiratorio”, refiere CNN.
A Bella le dio un derrame cerebral cuando ingresó al hospital la semana pasada días antes de que se le diera por primera vez como muerta.
Un hecho viral
Bella se hizo viral en las redes sociales días antes de su muerte debido a que se despertó en su funeral tras ser declarada muerta. Sin embargo, registró signos vitales.
Los familiares, sorprendidos y angustiados, informaban el 10 de junio lo ocurrido a través de un video que se hizo viral en redes sociales y confirmaban que, tras abrir el ataúd, se dieron cuenta de que la mujer aún respiraba.
El Ministerio de Salud de Ecuador informó el 11 de junio a través de un comunicado que Montoya ingresó en ese mismo hospital con un diagnóstico presuntivo de “accidente cerebrovascular”.
El hecho produjo que se abriera una investigación por lo ocurrido en el Hospital Martin Icaza de Babahoyo donde certificaron su muerte.
“Para analizar este caso en profundidad, el Ministerio de Salud en coordinación con la Agencia de Aseguramiento de la calidad de los Servicios de Salud conformó un Comité Técnico Nacional e iniciará una auditoría médica para establecer responsabilidades ante la supuesta confirmación de la muerte”, informó el ministerio de salud.
