La gran mayoría de parlamentarios respaldaron el informe del comité de privilegios que censura al ex primer ministro, Boris Johnson, por 354 votos contra siete, en el informe del llamado Partygate
“Las luchas internas de los conservadores por el hecho de que Boris Johnson engañó a la Cámara de los Comunes sobre el Partygate alcanzaron nuevas alturas amargas el lunes por la noche, y se les dijo a sus seguidores que agacharan la cabeza avergonzados”, publicó The Guardian.
Cabe destacar que Johnson se enfrenta a que se le bloquee el acceso especial al parlamento después de ser rodeado por conservadores furiosos en un intento de «restaurar la fe» en la democracia.
Rishi Sunak estuvo ausente del debate junto con otros altos ministros del Gabinete y los parlamentarios laboristas lo acusaron de haberse “fugado”. Downing Street dijo que estaba ocupado reuniéndose con el primer ministro sueco antes de asistir a una cena por la noche.
“A pesar del intento de Sunak de amortiguar la disputa interna sobre el informe, al evitar tomar partido en la votación sobre si su predecesor mintió a los parlamentarios, el derramamiento de sangre sobre el informe del comité de privilegios condenatorios sobre el continuo engaño de Johnson al parlamento se prolongó hasta tarde en la noche”, explicó el rotativo.
Hay que recordar que, dado que Johnson renunció a la Cámara de los Comunes la semana pasada, no se pudo hacer cumplir la suspensión recomendada de 90 días. En cambio, se aprobó una moción que decía que se le debería impedir recibir un pase otorgado a la mayoría de los exdiputados, que permite el acceso sin filtro al patrimonio parlamentario.
La votación marca el final de una investigación sobre Johnson que duró más de un año. Se espera que Chris Bryant, quien se recusó como presidente después de criticar a Johnson, recupere el relevo de Harman en las próximas semanas.
