James Cameron, director de la exitosa película «Titanic», y quien ha bajado 33 veces a ver los restos del naufragio, aseguró estar sorprendido por lo ocurrido con el sumergible «Titán», situación que calificó de surrealista.
En una entrevista a ABC News dijo: «Me sorprende la similitud con el desastre del Titanic, en el que el capitán recibió en repetidas advertencias sobre la presencia de hielo en el trayecto de su barco y aun así navegó a toda velocidad hacia un campo de hielo en una noche sin luna, lo que provocó la muerte de muchas personas«.
En 2012 el director de cine de Hollywood superó la profundidad a la que se encuentra el trasatlántico, por lo que ahora está sorprendido con lo sucedido.
«Y con una tragedia muy similar en la que no se hizo caso a las advertencias tenga lugar en el mismo lugar exacto, de entre todas las expediciones que se han realizado en el mundo, pienso que es simplemente asombroso. Es realmente surrealista«, dijo.
Cameron es un experimentado explorador de las profundidades, en esa expedición de 2012 se sumergió en la Fosa de las Marianas, considerado uno de los puntos más profundos de los océanos de la Tierra a casi 11 km (siete millas) bajo la superficie, en un vehículo sumergible de siete metros (24 pies) que diseñó el mismo llamado Deepsea Challenger.
Sabía lo que había pasado
Cameron dijo que él sabía que el submarino Titán había implosionado, pero que tenía la esperanza de estar equivocado.
Cuando supo lo ocurrido el domingo “El único escenario que se me ocurrió que podría explicar eso fue una implosión”.
«Un evento de onda de choque tan poderoso que en realidad eliminó un sistema secundario que tiene su propio recipiente a presión y su propia fuente de alimentación de batería, que es el transpondedor que usa el barco para rastrear dónde está el submarino» dijo.
Relata que durante toda la semana estuvo viendo como las autoridades corrían de un lado a otro buscando explicaciones y tratando de conseguir a las cinco personas, aunque muy en el fondo sabía que no sería posible.
“Y entonces, ciertamente, no fue una sorpresa hoy y me siento terrible por las familias que tuvieron que pasar por todas estas falsas esperanzas» dijo.
La experiencia de Cameron
Cameron bajó por primera vez en 1995, es decir 10 años después de que lo consiguieran en las profundidades, a ver los restos del Titanic. Llegó hasta los 3.821 metros y utilizó un submarino ruso bautizado como Mir que ahora está fuera de servicio.
En una entrevista con la revista «Playboy» en 2009 dijo que su motivación para hacer la película no era la historia de amor de los personajes del Titanic, sino su deseo de bucear entre los restos del naufragio.
En 2012 quiso descender hasta el punto más profundo de la tierra con el submarino Deepsea Challenger, creado por él, y pilotó el sumergible convirtiéndose así en uno de los primeros seres humanos en llegar hasta a los 8.221 metros de profundidad.
Nunca imaginó lo que iba a vivir en el fondo del mar, dos de las baterías del submarino fabricado estaban a punto de agotarse: «La brújula me daba errores, el sonar pasó a una mejor vida y por si fuera poco, dos de los tres propulsores de estribor ya no funcionaban. El submarino avanzaba muy despacio y era difícil encontrarlo», contó el director sobre su expedición en esa oportunidad.
Cameron también vivió una experiencia alucinante en ese momento, ya que el recorrido estaba calculado para hacerse en ocho horas, sin embargo, una corriente de agua atrapó la popa del sumergible provocando que se quedara atrapado en el fondo durante 16 horas, pero finalmente pudo salir.