Este domingo el presidente uruguayo Luis Lacalle Pou, rechazó de momento el ofrecimiento de ayuda del presidente Argentino Alberto Fernández a raíz de la peor crísis hídrica de los últimos 50 años.
El presidente argentino habría ofrecido a través de su representación diplomática en Montevideo, un buque de la Armada con unacapacidad de 300 toneladas de agua y una planta potabilizadora movil para paliar la fuerte sequía.
Asimismo, la posibilidad de enviar agua embotellada o en tanques, pero estaría sujeto a una disponibilidad de envases que todavía no fue confirmada.
La administración de Lacalle Pou, si bien se le agradeció el ofrecimiento y se mantiene en contacto con las autoridades argentinas, respondió que prefiere ver «cómo evoluciona la situación».
De acuerdo a las agencias metereológicas en el corto y mediano plazo las precipitaciones no serán suficientes para revertir la situación de emergencia hídrica en la zona metropolitana.
Los gobiernos de Venezuela y Colombia también ofrecieron su ayuda para enfrentar la emergencia que atraviesa Uruguay por la escasez de agua.
«Nos pondremos en contacto con su gobierno para ofrecer nuestra ayuda en todo lo que necesiten», escribió el presidente Gustavo Petro, en su cuenta de Twitter
Por su parte, el primer mandatario venezolano afirmó en unas declaraciones emitidas por el canal estatal: «Nuestro hermano pueblo del Uruguay está viviendo un caso extremo. Aprovecho a enviarle nuestro saludo solidario, nuestra oferta de ayuda humilde y modesta».
El biologo uruguayo Eduarfo Gudynas, investigador del Centro Latinoamericano de Ecología Social, declaró a CNN que el gobierno de Uruguay «no respondió adecuadamente a la crisis» y que el cambio climático no debe ser un justificativo por no haber respondido de forma adecuada a esta crisis.