En pleno verano Europa vive una ola de turismo que tiene abarrotada las principales ciudades, por lo que los hotspot (los puntos de acceso a Internet a través una red inalámbrica) han comenzado a imponen prohibiciones, multas e impuestos.
La escasez de viviendas , el tráfico, el ruido, la contaminación y la basura, muchos destinos populares en Europa están cambiando sus campañas turísticas de ‘ven a nosotros’ por estrategias anti-turismo de ‘por favor, no’, y algunas de las medidas para desalentar a los visitantes son bastante graves, refiere Forbes.
Los destinos más emblemáticos se han vuelto inhabitables para los residentes locales quienes se sientes invadidos, ya que la cantidad de turistas le ha quitado a muchos espacios la belleza natural.
Alternativas
El debate sobre cómo manejar los desbordamientos turísticos ha comenzado en los principales países europeos, a pesar de que la Unión Europea no se ha manifestado aún.
En las principales zonas turísticas los Hotspots han comenzado a bloquear las entradas para disuadir las llegadas.
“Los lugares más perfectos del mundo se están convirtiendo en fondos para nuestras selfies turísticas. El turismo de masas está convirtiendo los destinos en lo contrario de lo que alguna vez fueron”, refiere The Guardian.
Especialmente entre las ciudades y pueblos más populares, los lugareños dicen que no pueden soportar más los efectos destructivos del exceso de turismo.
Venecia, ha introducido una tarifa de entrada que oscila entre $3 y 10 para acceder a la ciudad y sus islas. Para gestionar las multitudes, Grecia ha implementado un sistema de franjas horarias para los visitantes. a la Acrópolis.
Mientras esto ocurre los turistas están atrapados en largas colas solo para acceder a las aceras, comprar una bebida, entrar a un restaurante o abordar un tren, un avión o un autobús.
Esperan más de dos horas para visitar la Acrópolis de Atenas, las líneas de taxi en la estación principal de trenes de Roma funcionan igual de largas.
Los bosques vírgenes, las playas y los pintorescos pueblos pequeños están abarrotados de visitantes al igual que los museos.
La situación se ha tornado tan grave que la Organización Mundial del Turismo predice que para fines de esta década, el flujo de turistas internacionales superará la asombrosa cifra de dos mil millones.
Ámsterdam
Amsterdam ha votado para prohibir la entrada de cruceros a su puerto principal, además ha activado una campaña, «campaña de desánimo» que prohíbe fumar marihuana al aire libre en el barrio rojo, mientras que las campañas oficiales digitales y de carteles se dirigen a los jóvenes británicos, alentándolos mantenerse alejado.
La alcaldesa de la ciudad Femke Halsema, explicó que esta medida tienen como objetivo disuadir a los visitantes de «tomar unas vacaciones de la moral» y controlar la afluencia de turistas y la perturbación que traen a la hermosa ciudad con su arquitectura pintoresca, museos incomparables, canales pacíficos y también su barrio rojo y cafeterías que venden marihuana.
Las autoridades han dicho que no hay ningún juicio moral involucrado en frenar un número desproporcionado de «hombres de 18 a 35 años que solo vienen de fiesta y usan nuestra ciudad como telón de fondo», dijo a la guía la portavoz de la ciudad, Carina Noordervliet.
“La campaña de desánimo está dirigida a un grupo de personas que en general no aportan a la ciudad de manera positiva”.
Italia
Desde 2021 en este país se prohíbe los grandes cruceros en la histórica laguna de Venecia, pero ahora ha impuesto medidas para restringir el acceso a la Fontana de Trevi y la Plaza de España.
Además se comenzó a cobrar tarifas de entrada para visitar el Panteón en un esfuerzo por controlar las multitudes y proteger la famosa maravilla arquitectónica.
Desde junio, la ciudad de Florencia prohíbe nuevos alquileres de vacaciones privados a corto plazo en su centro histórico, que es un sitio protegido por la Unesco.
En Portofino, el gobierno local introdujo una legislación para disuadir a los turistas que se demoran para tomarse selfies en las «zonas de no espera», que incluyen los lugares más fotogénicos. Las multas ascienden a $301, informa la BBC .
Una playa en Eraclea incluso ha prohibido la construcción de castillos de arena porque se consideran obstrucciones innecesarias.
Francia
En Niza, en la Riviera francesa, se instalaron obras de arte callejero en lugares muy frecuentados por turistas: trampas gigantes para ratas, para erradicar y eliminar la plaga turística, con un helado gigante como cebo.
Las trampas gigantes son un acercamiento humorístico pero también una muestra clara de los sentimientos de la ciudad hacia el turismo excesivo.
A nivel gubernamental, el mes pasado se dio a conocer un plan “para regular mejor los flujos turísticos y apoyar a las autoridades locales que experimentan aumentos repentinos en el número de visitantes”.
Además de recopilar información a través de una plataforma digital sobre mejores prácticas y regulaciones, una guía y un observatorio, el gobierno lanzará una campaña de más de 1 millón de dpoalres en marzo de 2024 para alentar a los turistas nacionales y extranjeros a «adaptar sus opciones de destino y horarios».
España
Uno de los destinos de peregrinación más populares, Santiago de Compostela en Galicia, planea lanzar un impuesto turístico como una forma de combatir el exceso de turismo.
Los funcionarios locales también planean establecer controles sobre la cantidad de turistas en el centro histórico de la ciudad.
En Mallorca, que tras la superpoblación de Ibiza se ha convertido en el punto de moda de las islas Baleares, se está convirtiendo en un hervidero de protesta antiturista:
En Ibiza, un grupo de miembros activistas del movimiento ‘Futuro Vegetal’ apuntó este mes a un superyate de 300 millones de euros. Rociaron pintura roja en el megayate Kaos propiedad de Nancy Walton Laurie, la multimillonaria heredera de la empresa Walmart.
Portugal
En Portugal, poner música a todo volumen en muchas de las playas más populares puede ser sancionado con multas que van desde los $291 hasta los $39.000.
En la costa del Algarve se recibe más de un millón de turistas, principalmente británicos, durante la temporada alta. Las multas van desde los $291.
La lista de prohibiciones y restricciones en Portugal a las que pueden enfrentarse los viajeros en las playas incluyen juegos de pelota no autorizados, acampar fuera de los campings, pescar en zonas de baño y sobrevuelos de aeronaves por debajo de los 1.000 pies, excepto los destinados a operaciones de vigilancia o rescate.
Croacia
En esre pais se impuso la campaña «Respeta la ciudad», donde se impulsa que sea mas pequeño el equipaje para minimizar el ruido de las maletas con ruedas en las calles adoquinadas del centro de la ciudad de libro ilustrado.
Las nuevas medidas para controlar el exceso de turismo también incluyen la prohibición de dormir en áreas públicas, orinar en espacios públicos, treparse a la cima de monumentos, beber y beber alcohol cerca de espacios públicos protegidos, incluidas las escuelas, y delitos relacionados con las drogas, todo lo cual es punible. con elevadas multas y penas de cárcel.
Dubrovnik ya ha registrado 289.000 llegadas y 763.500 pernoctaciones desde principios de este año.
